Los principales sindicatos agrarios gallegos han lamentado hoy el resultado de la reunión de ayer de los ministros europeos de Agricultura, que acordaron ayudas al sector ganadero por 500 millones de euros.

El secretario general de UUAA, Roberto García, en declaraciones a Efe, ha expresado su "decepción total" por el resultado y también por las expectativas que había creado la ministra española por una posición común de los países del sur, que "quedó totalmente fracasada".

García criticó que no se haya subido el precio de intervención hasta los 28 céntimos, como pedían las organizaciones, sino que ni siquiera fue tratado y se aprobaron ayudas por 500 millones, la mitad de lo que la UE recaudó este año por el exceso de producción, por la denominada supertasa.

A su entender, los ministros perdieron también una oportunidad de "reconocer un error grave" sobre el escenario sin cuotas, porque no se ha incrementado la demanda mundial de estos productos, sino que ha ocurrido todo lo contrario, con la caída en China y el veto ruso.

Sobre los 500 millones, afirmó que "ni era esa la medida (necesaria), ni la cantidad es suficiente.

Sobre la reunión del jueves de la ministra española con los tres eslabones de la cadena, consideró que "se está inflando un globo de espectativas", aunque reconoció que es un avance que se maneje la "filosofía" del caso francés.

No obstante, dijo que hay cuestiones importantes pendientes, como la "herramienta, el andamiaje jurídico" que garantice el cumplimiento y la sanción y la urgencia en el tiempo, ya que la solución debería ser de aplicación inmediata en los contratos de octubre y ello no va a ser posible, máxime cuando la industria -denunció- está ofreciendo precios incluso inferiores a los de la actual "dramática" situación.

En el mismo sentido se manifestó a Efe la secretaria general del Sindicato Labrego Galego (SLG), Isabel Villalba, que denunció que el fin de las cuotas ha llevado "a un incremento de producción totalmente desordenada y una cantidad de excedentes que lo que llevaron es a precios ruinosos y esos precios van a llevar a la desaparición de la producción en muchas zonas".

Villalba consideró que la reunión de los ministros de la UE era una oportunidad para regular la producción y evitar una "competencia feroz, que se esta dando incluso entre países y zonas a nivel interno".

Criticó que la política agraria se haya orientado a la exportación, cuando son muy pocas las empresas que lo hacen, y ninguna española entre las veinte más grandes, en base a precios bajos, con el 7 por ciento de la exportación marcando los precios a la baja en el conjunto, lo que consideró "una absoluta equivocación", ya que la prioridad deben ser precios que permitan remunerar al productor y orientar las medidas a la producción de calidad y valor añadido.

La sindicalista rechazó que las medidas se orienten a compensar la renta y, además, en la medida en que se acordó, con 500 millones de euros, cuando recordó que una diputada alemana señaló recientemente que para compensar los 10 céntimos perdidos solo por los productores de aquel país serían precisos 3.000 millones.

Isabel Vilalba insistió en que "pensar elevar el precio de intervención y comprar todos los excedentes por no ir a un sistema de regulación equilibrado parece que es bastante poco factible".

Finalmente, reconoció que su organización tenía pocas esperanzas puestas en la reunión de ministros, "porque el discurso es muy neoliberal, muy desequilibrado" y los ganaderos no tienen nada que ganar con la desregularización.

Por su parte, el secretario general de ASAJA Galicia, Francisco Bello lamentó que no se abordase en la reunión de ministros de la UE la subida del precio de intervención, pero recordó que su prioridad es recuperar el precio de la leche en el mercado español, "que haya valor en la leche y ese valor se reparta entre los eslabones de la cadena de una forma equitativa".

Tras reiterar que, en ese sentido, el consejo de ministros de la UE "defraudó", valoró las ayudas aprobadas, aunque agregó que será preciso "ver ahora como se materializan, como se concretan", pero insistió en que "serán bienvenidas por el sector, porque la crisis es tremenda, aunque "no son la solución".

Preguntado por la reunión del próximo jueves en Madrid, respondió a Efe que el objetivo es "un acuerdo que lleve, desde luego, implícita la tutela de la administración, con posibilidad de ejercer de árbitro y de sancionador, en caso de incumplimiento y con plenas garantías que ese acuerdo se cumpla".

"Si no es así -auguró- será difícil llegar a acuerdos".

También explicó que existe urgencia para la implementación de estas ayudas por la situación del sector y dijo que entienden que "puede haber dificultades", pero "si hay voluntad, si el sector también esta unido", puede haber "un margen de maniobra".