A los radares fijos, por tramos y móviles, y los seis helicópteros de la DGT provistos del sistema de control de velocidad (uno de ellos asignado al Centro de Gestión de Tráfico en A Coruña) se suman dos nuevos radares Pegasus que son capaces de detectar con precisión milimétrica los excesos de un vehículo a 300 metros de altura y un kilómetro de distancia. Estos dos nuevos equipos de control de velocidad desde el aire reforzarán la vigilancia en las comunidades autónomas que así lo requieran en operaciones salida o campañas especiales. Las carreteras secundarias, donde se producen más del 90% de los accidentes, son el principal objetivo de los helicópteros de Tráfico. Pero la incorporación de estos dos nuevos radares Pegasus permitirá completar la posibilidad de vigilancia sobre la totalidad de la red viaria.

Desde que se puso en marcha el primer radar Pegasus en España, en 2013, Tráfico denunció desde el aire a 8.644 conductores por pisar más de la cuenta el acelerador. En Galicia, la DGT incorporó al helicóptero con base en Alvedro un radar con dos cámaras, una panorámica que facilita el seguimiento y captación de la velocidad y otra de detalle. Entre julio y septiembre del año pasado, la aeronave sorprendió in fraganti al volante a 230 conductores.