"En ese nuevo ciclo político, el objetivo será mantener la centralidad de nuestra política, centralidad cada vez más necesaria en Galicia, viendo la situación y escoramiento del Partido Socialista", anunció ayer el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo. El también titular de la Xunta asistió a las Juntas provinciales de su partido en A Coruña y Lugo para analizar los resultados del 24-M, mientras la oposición alimentaba el debate entorno a la posibilidad de que Feijóo dé el salto a Madrid, bien para entrar a formar parte del Gobierno de Rajoy como ministro o para irse a la dirección del PP.
La oposición aprovecha el silencio del político gallego entorno a su futuro, no ha confirmado si opta a un tercer mandato en la Xunta, para presentarlo como un dirigente más interesado en lo que pasa en la escena estatal que la autonómica.
El titular del Gobierno gallego explicó ayer que el PPdeG quiere copar el centro político y de paso situar a los socialistas más a la izquierda por sus potenciales acuerdos con las Mareas, que gobernarán en A Coruña, Santiago y Ferrol con el respaldo del PSdeG. El reto del PPdeG es, en palabras de Feijóo: "Volver a acercarnos a la gente y volver a conectar con la mayoría de la gente que, o bien no nos votó en estas elecciones o bien se mantuvo en la abstención".
Tras las juntas provinciales del PPdeG, donde los alcaldes diagnosticaron que no se supo ver la fuerza que iban a tener los partidos emergentes y no se acertó con la campaña por falta de cercanía con la gente, Feijóo comentó a los periodistas que ya había tenido una conversación "instructiva y constructiva" con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dentro de la ronda del jefe del Ejecutivo con los barones autonómicos, tras la debacle del 24-M.
Sin concretar cuándo y si fue en persona o por teléfono, Feijóo explicó que le dio su "opinión sobre la situación política que estamos viviendo en este momento en España y la evaluación de los resultados del PP en Galicia".
Por la mañana en Lugo confirmó la conversación. Por la tarde, en A Coruña, dio casi por hecho que los cambios que prepara Rajoy afectarán "probablemente" al partido y al Gobierno para que ambos "tomen impulso" de cara a las próximas elecciones generales. Así lo dijo tras reiterar que por su parte el PPdeG acometerá "cambios de actitudes, políticas y equipos" .
Por su parte, la oposición puso el acento en la posible marcha de Feijóo. "Muy triste ven el futuro en el PP si ven a Feijóo como alternativa", dijo el portavoz del PSdeG, José Luis Méndez Romeu, para quien de ser así el PP no ha entendido los resultados del 24 de mayo. Para el portavoz de AGE, Xosé Manuel Beiras, sería "la demostración del nivel en qué se encuentra la Marca España: degradación".
"Desde hace tiempo" el presidente gallego "tiene sus miras" en Madrid y así la Xunta es "un gobierno interino, sin impulso, sin capacidad de respuesta", lamentó el portavoz del BNG, Francisco Jorquera. Pedro Puy, del PPdeG, no quiso opinar sobre "futuribles", si bien destacó que Feijóo "tiene capacidad de sobra para asumir cualquier reto político que le encomiende el PP".
