En su defensa de que en los nuevos estatutos para la recién creada Fundación Obra Social de Galicia como depositaria de la herencia de las dos antiguas cajas "no se produjo, ni se produce ningún cambio" en las sedes, la Xunta se cuida mucho de ceñir esa supuesta permanencia a "la ubicación" . A la "distribución" en su momento acordada por los directivos de las dos entidades, con la "social y fiscal" en A Coruña y la "institucional" en Vigo. "Exactamente la misma", insiste en una nota de prensa emitida el pasado sábado, pero sin un solo detalle sobre el papel de cada una, ni las razones de por qué la comisión gestora abanderada por la Consellería de Facenda, si realmente aspiraba a un modelo idéntico, eliminó todas las funciones asignadas en los estatutos "predecesores" a los que tanto se agarra.
La simple lectura de ambos refleja con claridad el abandono de la ciudad olívica como referencia en la gestión, pese a que la inmensa mayoría del patrimonio que maneja Afundación procede de Caixanova, y que la contribución de Caixa Galicia se redujo prácticamente a las reservas porque su obra pictórica y muchos edificios se compraron con fondos del negocio financiero, se tuvieron que segregar al banco y actualmente están en manos de Abanca. En esa misma nota de prensa, el Gobierno gallego se apuraba a restar importancia al "domicilio fiscal" en A Coruña -la organización está exenta de tributar-, pero, evidentemente, no a la sede social, el corazón de cualquier entidad si nada dice lo contrario.
| ¿Qué dicen exactamente los estatutos aprobados el 18 de junio? Los que aprobó esa comisión gestora y de los que nada se supo hasta esta pasada semana, cuando Manuel Galdo, director xeral de Política Financieira y su presidente, lo anunció en el Parlamento. "El domicilio social y fiscal radica en A Coruña, Cantón Grande 21-23, y la sede institucional en Vigo, Policarpo Sanz 24-26". Sin más.
| ¿Qué fijaban los anteriores, fruto del acuerdo de las dos cajas que en teoría esgrime Facenda? "La sociedad tiene su domicilio social y fiscal en la ciudad de A Coruña, Rúa Nueva 30,32". En Vigo "se establece la dirección efectiva del negocio y sede institucional". "Se entenderá por sede institucional -continúa- la sede del consejo de administración y de sus comisiones". Por "dirección efectiva del negocio", los estatutos marcaban "el lugar desde el que se ejercen las funciones encomendadas al primer ejecutivo". La comparación entre las dos redacciones salta a la vista.
| Ahora no hay negocio, ¿es razón suficiente? No, si Facenda quisiera replicar de verdad el reparto. Porque hay gestión. Y un patronato que debe reunirse al menos dos veces al año "y tantas veces como sea necesario para la buena marcha de la fundación".
| ¿Y dónde se reunirá el patronato? Como la fundación solo cuenta con un órgano de decisión, su patronato equivaldría a una junta general. Sus encuentros se celebran en la sede social. Por lo tanto, en A Coruña. La convocatoria le corresponde al presidente. Existe la posibilidad de citar a los patronos en otra ubicación. Pero de manera voluntaria. Los estatutos de Facenda, a diferencia de los anteriores, no le obligan a hacerlo en Vigo.
| ¿Qué relevancia tiene a "sede institucional"? Apariencia. Un status vacío de contenido. Lo que sí permiten expresamente los estatutos es "establecer sedes complementarias en cualquier otro municipio del territorio de Galicia". A efectos prácticos, la entidad ya cuenta con este tipo de sedes complementarias en las principales ciudades de la comunidad. Salvo en esa mención "institucional", Vigo es igual a cualquier dependencia en Santiago, Ferrol o Lugo. A Coruña se queda por encima de todas.
| ¿Es posible cambiar las sedes? Sí. "El patronato podrá promover el cambio de domicilio y de sedes, mediante la oportuna modificación estatutaria con inmediata comunicación al protectorado en la forma prevista en la legislación vigente", señalan los estatutos. Vigo tiene derecho a un patrón, como el resto de los seis ayuntamientos más poblados, con un voto ponderado, por censo, de 2,07.
| ¿Las dos viejas cajas aportaron lo mismo? De los 300 millones de euros en patrimonio con los que nació la obra social fusionada, la mayoría venían de Caixanova. Es cierto que Caixa Galicia desembolsó una buena parte de los 80 millones del remanente, porque, como el que fue su responsable reveló en la comisión de investigación de cajas, el director general, José Luis Méndez, les advirtió en 2008 que la caja flaqueaba. Galdo apuntó un dato muy significativo la pasada semana: entre 2000 y 2004, sin contar el ladrillo, Caixa Galicia solo dio 23 millones a la obra social. Pero la nueva fundación también suma, entre otro patrimonio, toda la valiosa pinacoteca de la antigua Caixanova y también la Escuela de Negocios. La obra plástica de la antigua Caixa Galicia fue comprada en su día por el banco y queda al margen de la entidad.
| ¿A quién lego Novacaixagalicia sus estatutos? Al banco. No a la fundación. Con la nacionalización y la ficha bancaria, NCG asumió la misma norma interna. Y lo sigue haciendo teóricamente hasta que Banesco lo fusione con el Etcheverría, en el cuarto trimestre de este año. Así consta en la web de la entidad y en el registro mercantil.
| ¿Se respetaron durante su etapa bajo control estatal? Los estatutos marcaban como general las cumbres directivas en Vigo y, la opción de hacerlo en "cualquier otra ciudad" para "una sesión concreta". El expresidente, José María Castellano, aseguraba que a él le correspondía fijar la ubicación. Según confirman fuentes internas del banco, los encuentros en Vigo fueron "anecdóticos".
| ¿Y la sede en Santiago? Paradójicamente, pese ésta es una nueva entidad que integra el pasado y abre una nueva etapa, Afundación arrastra una llamativa duplicidad. Porque la verdadera fundación Novacaixagalicia nació el 24 de julio de 2012 fruto de las dos fundaciones "instrumentales" que cada tenía para ejecutar la obra social. Por eso su objetivo una vez unidas era "el impulso, gestión y desarrollo de aquellas actuaciones culturales, cívicas, de investigación y desarrollo, socio-económicas, mediambientales y demás análogas de interés general". Entonces, sus responsables la afincaron en Santiago "por lógica". Rúa do Vilar, 19. Ésa, y no la antigua caja, fue la organización declarada de interés gallego por la Xunta en octubre de ese mismo año. A ella apuntaron, como futura sede, cuando Novacaixa tuvo que abandonar el domicilio fiscal originario, propiedad del banco, para trasladarse a otro edificio en A Coruña. Era, en principio, algo temporal, hasta la reorganización interna.
| De hecho, ¿dónde trabajó la comisión gestora? No se sabe. Con la propia argumentación de la Xunta, tendría que haberlo hecho en Vigo.
| ¿Quién la tutela? El protectorado corresponde a la Xunta. Tras dejar sin funciones a Vigo, no tendrá ninguna obligación de vigilar que la ciudad cuenta para Afundación.
