En las conversaciones telefónicas intervenidas por Aduanas, los responsables de Vendex bautizan como la "ruta del bacalao" las visitas que hacían a dirigentes políticos para entregarles "papeles" o "documentos", en alusión a los presuntos pagos o regalos para garantizar la continuidad de sus contratos en ayuntamientos gallegos tras las municipales de 2011. María Sol Fraga Eirís, trabajadora de Vendex que ayer declaró en calidad de testigo ante la juez de la Pokemon, reconoció el pago de "gratificaciones" por parte de la empresa. En algunos de los recibos mostrados por la magistrada a la empleada, que se encargaba de contabilizar las facturas y remitirlas a la sede de Vendex en Madrid, reconoce su letra y la del delegado de la empresa en Galicia, José María Tutor. En su declaración, apuntó que fue el propio Tutor quien le explicó que los importes a retirar de las cuentas tenían que ser inferiores a 3.000 euros para evitar a Hacienda.
Sobre las dos hojas con nombres encriptados, sus iniciales coinciden con las siglas de PP, PSOE y BNG, con una relación de "rabajadores" que van a darse de alta en "nuevo proyecto de investigación", Fraga Eirís no reconoce a Pedro Pérez (PP), Benito Nogueira González (BNG) y Pablo Santos Orgueira Estévez (PSOE) ni tiene constancia de la existencia de tal plan.
