La Xunta constituyó ayer oficialmente la Axencia Galega de Servizos Sociais, un organismo que sustituye al Consorcio Galego de Benestar y que aglutinará en el futuro hasta 300 centros de atención social. Entrará en funcionamiento de forma efectiva en un plazo máximo de tres meses con la incorporación de las primeras 27 escuelas infantiles, dependientes de la Dirección Xeral de Familia.

La conselleira de Traballo, Beatriz Mato, explicó que será la agencia más grande de las que dependen de la Administración autonómica, tanto por número de centros como por la "diversidad de servicios"