Cada día más de dos familias gallegas pierden sus casas. Setenta al mes. Ni el Real Decreto Ley aprobado por el Gobierno central en 2012 para reducir los desahucios ni las medidas adoptadas por la Xunta han servido para poner freno a esta situación. Entre enero y marzo de este año el número de desalojos por impago de hipoteca ascendió en Galicia a un total de 216, casi un 28 por ciento más que hace un año. Es el tercer mayor incremento registrado en España, solo por detrás de Murcia y de Canarias. Pero además la mitad de los desahucios de viviendas en propiedad que se registran en la comunidad autónoma tiene lugar en Pontevedra, donde en el primer trimestre prácticamente se duplicó la cifra de expulsiones con respecto a 2013.

Según los datos del Consejo General del Poder Judicial, en Pontevedra el número de lanzamientos -cuando los juzgados dan la orden de desahucio- se elevó a 114 en los tres primeros meses del año, un 93 por ciento más si se compara con el primer trimestre de 2013, cuando solo se ordenaron 59. Ha sido la tercera provincia española donde más se han incrementado los desalojos en estos primeros meses del año. Solo en Cuenca y en León hubo un mayor aumento.

Pero además Pontevedra se coloca a la cabeza de todas las comunidades del noroeste español -Castilla y León, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra y La Rioja- con un mayor número de familias que han perdido la propiedad de sus casas por no abonar las cuotas de la hipoteca.

Los 114 desahucios contabilizados por el Poder Judicial en esta provincia triplican a los que se registraron, por ejemplo, en Salamanca (41), en Cantabria (28) o en Ávila (33) y también superan a los 86 desalojos que se produjeron en Asturias.

A pesar de que desde el Gobierno y la Xunta señalan que empieza a haber signos de recuperación económica, el año 2014 ha empezado con mal pie para las familias con dificultades económicas para costearse su vivienda.

Los 216 desahucios registrados entre enero y marzo fueron la cifra más alta registrada en un trimestre desde enero de 2013. El Poder Judicial no dispone de datos de lanzamientos anteriores a esa fecha. Y, en el caso de Pontevedra, también se batieron récords de desalojos entre enero y marzo.

Además de Pontevedra, también se incrementaron los desalojos por impago de hipoteca en Lugo -un 15,4 por ciento-, aunque en esta provincia solo hubo 15 familias afectadas. Por el contrario, bajaron en Ourense donde solo hubo ocho (un 33 por ciento menos) y en A Coruña, donde las entidades bancarias desalojaron a 79 familias, lo que supone un 7,1 por ciento menos que el mismo periodo del pasado año.

En comparación con otras comunidades en Galicia los desahucios por impagos de hipotecas se incrementaron por encima de la media española del 5,7 por ciento.

Pero no todo son datos negativos. Mientras suben los desalojos de viviendas por no pagar la hipoteca, se están reduciendo las expulsiones de inquilinos por no abonar el alquiler. Un total de 421 caseros echaron a sus arrendatarios morosos, un 8,7 por ciento menos que hace un año.

El mayor número de desalojos de viviendas en alquiler se produjo de nuevo en la provincia de Pontevedra, donde 172 gallegos fueron expulsados por no pagar el alquiler, un 9,9 por ciento menos que en el primer trimestre de 2013.

En A Coruña los inquilinos desahuciados fueron 155, mientras que en Lugo solo hubo 39 afectados y en Ourense 55.

Aunque el Poder Judicial solo registra cifras de lanzamientos desde principios de 2013, sí cuenta con datos históricos de ejecuciones hipotecarias, que es cuando se inicia el procedimiento en el juzgado para desahuciar a una familia.Desde el inicio de la crisis, se han tramitado en los juzgados más de 11.000 desalojos por impagos de hipoteca. La buena noticia es que en el primer trimestre de este año las ejecuciones hipotecarias en Galicia se redujeron un 24 por ciento.