Los siete ediles condenados por prevaricación recurrirán el fallo judicial porque no solo consideran que es "injusto" y que ellos no cometieron ningún delito, sino que además estiman la pena impuesta de nueve años de inhabilitación para cargo o empleo público "desproporcionada".

Así lo expresó ayer María Pardo, hasta ahora portavoz del gobierno municipal, junto a Ángel Currás, Negreira, Calvo y Alfonso Rueda en la sede del PPdeG, ante la prensa en una comparecencia en la que no admitió preguntas y se limitó a leer un comunicado. Mientras ella atendía a la prensa, sus otros seis compañeros abandonaban por el garaje las instalaciones populares.

Los condenados "siguen confiando plenamente en su inocencia", pero la ley orgánica de régimen electoral los obliga a dejar el cargo aunque la sentencia se haya producido en primera instancia. Otra situación se produce en cuanto a su permanencia en el partido.

El regidor Ángel Currás admitió tras conocer el fallo que suponía "un duro golpe" para su equipo y que tomarían una decisión "en horas", que finalmente se produjo.

El PP les abrió expediente disciplinario a los siete concejales cuando fueron imputados y posteriormente juzgados. La condena supone su expulsión de la formación, pero desde la formación que preside Alberto Núñez Feijóo, de viaje el día del juicio a los ediles y también la jornada en que se produjo la sentencia, matizan que esta podría suspenderse hasta que el fallo sea firme. Fuentes populares explicaron que todavía no se ha abordado este asunto, "secundario" respecto a la solución de la situación en el concello.

La dimisión de los concejales deja casi desierta la junta de gobierno de la capital de Galicia, que consta de ocho miembros más el alcalde. Solo este y la teniente de alcalde Reyes Leis, de viaje profesional el día en que se votó la decisión de pagar la defensa de Varela, se ausentaron de aquel encuentro.