El 20,4% de la población española está, según las estadísticas elaboradas por el INE, en riesgo de pobreza, cuatro décimas menos que en 2012. En Galicia el porcentaje es tres puntos inferior al estatal, un 17,2% -la séptima tasa más baja del país- y supone un descenso con respecto a la tasa de riesgo de pobreza de 2012, que fue del 18,3%. Es decir, en 2013 casi 476.000 gallegos estaban bajo el umbral de la pobreza, 33.000 menos que en año anterior. Pero este dato que "mide la desigualdad", explica el INE, está muy influido por los ingresos de la población. Si bajan, también baja el umbral de la pobreza, que se sitúa en el 60% de la mediana de ingresos por unidad. La tasa de riesgo de pobreza es el porcentaje de personas por debajo de dicho umbral, que el INE fija en 17.039,8 euros para un hogar con dos adultos y dos menores de 14 años. El ingreso medio anual neto por persona en Galicia es de 10.106 euros, 425 por debajo de la media estatal.

Otra forma de medir la pobreza es el indicador AROPE de la UE de riesgo de pobreza o exclusión social, que también recoge el IGE. En él se incluiría no solo a la población en riesgo de pobreza -la usada por el INE para su tasa de riesgo-, sino también los hogares en situación de "carencia material severa" -cuando carecen de cuatro conceptos de nueve de una lista, como la calefacción o el pago al día de recibos- y los de baja intensidad de empleo. El indicador AROPE en España en 2013 es del 27,3% y en Galicia, del 24,3 -0,5 puntos más que en 2012-. En concreto, en la comunidad, además del 17,2% de los gallegos en riesgo de pobreza que usa el INE, habría un 4,6% con carencias materiales severas y un 14,1% que vivirían en hogares con baja intensidad de trabajo.

Los hogares gallegos siguen pasando apuros por la crisis. Así lo constata el Instituto Nacional de Estadística (INE) en su Encuesta de Condiciones de Vida relativa al año 2013, que muestra cómo más de 138.000 familias se lo piensan dos veces a la hora de usar la calefacción por el gasto que supone. En total, un 13,3 por ciento de los hogares gallegos admite que no puede permitirse mantener su casa a una temperatura adecuada.

Con este porcentaje Galicia lidera el ranking autonómico en lo que el INE define como una "carencia material". Además, en un solo año, la cifra de familias que no ponen la calefacción -el problema en Galicia es el frío- o lo hace en muy contadas ocasiones -el INE no explica en detalle el epígrafe- se ha duplicado en la comunidad, dado que el porcentaje de hogares que reconocían dificultades en este capítulo en 2011 era del 6,6 por ciento.

Asimismo los hogares que no pueden concederse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días se multiplicaron de un año para otro por siete, al pasar del 0,8 por ciento en 2012 al 5,7 por ciento del último dato reflejado por el organismo estadístico. Solo las familias canarias denuncian más estrecheces en este capítulo, hasta en un 6,9 por ciento de los casos.

Aunque no afecta a bienes o servicios básicos para la supervivencia, Galicia también destaca en el apartado de carencias en la que atañe a quienes no pueden permitirse irse de vacaciones al menos una semana al año, lo que ocurre en 57 de cada cien familias, diez puntos por encima de las que se hallaban en dicha situación en 2012. No obstante, lo tienen un poco peor en este aspecto los andaluces -un 57,4%- y, sobre todo, los murcianos -un 63,6%-.

También se elevó la cifra de quienes no tienen capacidad para afrontar gastos imprevistos, con la que lidian ya 38 de cada cien familias, aunque la media estatal sea tres puntos superior. En cambio, mejoró la situación en los datos de hogares que se ven obligados a posponer el pago de recibos de hipoteca o alquiler o de servicios como el agua o el gas. El 5,5% de las familias admite recurrir a esta medida -tres puntos menos que en el resto del Estado- para ir tirando pero un año antes optaba por este tipo de soluciones un 6,2%.

En general, existen "ciertas" dificultades, dificultades o muchas dificultades para llegar a fin de mes en un 71 por ciento de las casas gallegas, diez puntos más que un año atrás. Solo un seis por ciento de las familias se halla en el extremo opuesto y supera el mes con facilidad o mucha facilidad.