La declaración aprobada por unanimidad la semana pasada en el Parlamento gallego a favor del pueblo palestino ha derivado en un conflicto institucional con el Gobierno de Israel. En una carta remitida al Pazo do Hórreo el embajador israelí, Alon Bar, traslada su enfado a la Cámara gallega por situarse del lado de "los peores y más extremistas enemigos de Israel". Los grupos parlamentarios mostraron su sorpresa por la reacción del representante israelí puesto que todos los años aprueban una resolución de apoyo a la causa palestina y otra de condena del holocausto y se reafirmaron en el contenido del texto aprobado por el Parlamento.

En este acuerdo, aprobado con motivo del comienzo del éxodo del pueblo palestino que se conmemora mañana, se insta a la comunidad internacional a que exiga a Israel el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas y que "reconozca el derecho al retorno de las personas y comunidades a las tierras y casas de las que fueron expulsadas".

Es este párrafo el que ha enervado al embajador de Israel que trasladó su malestar en una carta dirigida a la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, al portavoz del grupo popular y socialista de Galicia, así como a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, y al portavoz del PSOE en el Congreso, Alfonso Alonso. Tras mostrar su "sorpresa" por esta declaración institucional, el representante israelí advierte que el Parlamento de Galicia se sitúa "fuera del consenso de la Unión Europea sobre los parámetros del futuro acuerdo de paz entre palestinos e israelíes". Según dice, la petición de la Cámara gallega de que se reconozca el derecho al retorno de las personas y comunidades a las tierras y casas de las que fueron expulsadas supondría "la desaparición del Estado de Israel". "Solo sirve para favorecer las posiciones más extremistas de quienes persiguen la desaparición del Estado de Israel", añade.

La presidenta de la Cámara, que reenvió la carta a todos los grupos parlamentarios, no quiso ayer opinar sobre la misiva del embajador israelí.

Desde el grupo popular explicaron que contestarán a la carta "con la tranquilidad y la convicción" de que, en la declaración aprobada en el Parlamento, se limitan a apoyar las resoluciones de la ONU.

Más vehemente fue la reacción de AGE y BNG. El portavoz de Alternativa Galega de Esquerda, Xosé Manuel Beiras, se apresuró a responder con otra carta al embajador de Israel advirtiéndole que sus palabras eran "inadmisibles". El líder de Anova elevó el tono de la polémica al acusar al representante israelí de "soberbia" y de "injerencia en las decisiones soberanas de la Cámara de Representantes del Pueblo Gallego".

El portavoz del BNG, Francisco Jorquera, también se mostró muy duro al calificar de "impresentable" la carta enviada por la Embajada. El Bloque pedirá en la próxima junta de portavoces de la Cámara que se envíe una contestación "reprobando" la actitud de Alon Bar.