La Xunta permitirá la instalación de piscifactorías en Red Natura. La condición para ello es que "no afecte de forma significativa" a los hábitats, que supere los estudios de evaluación ambiental y que se ajuste al Plan de Acuicultura. Así se recoge en el Plan Director que entrará en vigor la próxima semana, con cuatro años de retraso con respecto al plazo dado por la UE y que derivó en un expediente a España por incumplimiento de la directiva Hábitat. En los espacios Red Natura quedará prohibida la apertura de nuevas explotaciones mineras a cielo abierto, así como parques eólicos, minicentrales o instalaciones fotovoltaicas. Los aprovechamientos energéticos y las minas que ya estén ubicados en lugares protegidos podrán, sin embargo, continuar con su actividad e incluso se podrán autorizar modificaciones o ampliaciones.

El plan que ordena y regula los usos permitidos en las 390.000 hectáreas de terreno amparadas por la protección Red Natura comenzó a tramitarse hace tres años, cuando ya había vencido el plazo límite marcado por la UE para presentar el documento. El conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, reconoció ayer la "complicación" en tramitar un documento donde intentaron conciliar la protección de los hábitats con las necesidades derivadas de los asentamientos poblacionales afectados.

"La presentación de este Plan Director permite a Galicia salir del incumplimiento de la normativa Hábitats de la UE", explicó Hernández. La Xunta aparca, sin embargo, el proyecto para ampliar la Red Natura. Pese a que la comunidad gallega está entre las autonomías con menos porcentaje de superficie protegida -apenas el 12 por ciento-, la Consellería de Medio Ambiente explicó ayer que no está "en sus objetivos a corto plazo" incrementar el territorio amparado por esta figura de protección.

La prioridad es "establecer unas reglas" para los espacios que ya están protegidos. Debido a que hay asentamientos poblacionales incluidos en Red Natura, la Xunta dará vía libre a "todas aquellas actividades tradicionales", entre las que citó los usos agroganaderos, forestales o la actividad de las conserveras.

Las plantas acuícolas también estarán permitiras pero con restricciones. Podrán autorizarse piscifactorías en hábitats considerados "no prioritarios" de Red Natura. "Cualquier actividad que pase un procedimiento reglado de impacto ambiental y evaluación ambiental estratégica, que no afecte de forma significativa a los hábitats es posible", explicó el conselleiro.

Pero también queda abierta la puerta a que se instalen estas plantas acuícolas en zonas "prioritarias" en caso de que "no fuese posible otra ubicación", según aclaran en Medio Ambiente. - incluso podrán autorizarse estas piscifactorías si provocase "un impacto puntual" en el hábitat siempre que se determinen medidas compensatorias y se informe a la UE. Bajo esta premisa, Hernández reconoció que podría darse luz verde, por ejemplo, al proyecto que Pescanova quería desarrollar en Cabo Touriñán.

En cuanto a las explotaciones mineras a cielo abierto, quedarán prohibidos nuevos aprovechamientos. Pero, tal y como matizó la directora xeral de Conservación da Natureza, Verónica Tellado, las ampliaciones "no están excluidas, siempre y cuando el procedimiento de evaluación no determine que hay un deterioro significativo del entorno".

En el caso de los parques eólicos y las minicentrales tampoco se permitirán nuevas concesiones, pero si podrán autorizar reformas o repotenciaciones. Y, en todo caso, la Consellería de Medio Ambiente explicó que no tiene un plan para rescatar o promover la retirada de estas instalaciones de los espacios protegidos.