El alcalde de A Coruña, el popular Carlos Negreira, justificó ayer la falta de medidas disciplinarias después de que su mano derecha fuese sorprendido por los investigadores del caso Pokemon pidiendo trabajo al grupo Vendex en algunas de las conversaciones interceptadas que constan en el sumario del caso. Negreira alegó que esas decisiones no se pueden tomar basándose "conjeturas, sino en hechos probados", por lo que reclamó que se levante totalmente el secreto de sumario, que todavía permanece sobre gran parte de la causa. "Sin ver el sumario entero es muy difícil tomar decisiones", indicó.

Un día después de cerrar filas con el teniente de alcalde, Julio Flores, imputado en la causa junto a otro edil socialista y algunos trabajadores municipales, el regidor advirtió que no consentirá la comisión de delitos. Por ello, pidió "acabar con la instrucción", "culminar las actuaciones" y "poner el libro entero sobre la mesa".

Negreira, también líder del PP provincial, comparó con un libro el sumario de la Pokemon, cuya ramificación en A Coruña ha sido bautizada como Pikachu y que investiga supuestas concesiones a empresas a cambio de contrataciones. "Usted va por la mitad de un libro y no puede opinar sobre el conjunto del libro", argumentó.

Por eso se cuidó de no mencionar a Flores, que, según los pinchazos habría pedido trabajo para personas en filiales de Vendex a su delegado en Galicia, José María Tutor. Sí citó en cambio a Dulce Rodríguez, asesora de la concejala de Cultura, quien alude a Negreira al charlar con Tutor por teléfono a propósito de la contratación de un trabajador. "¿Usted ha oído las declaraciones de Dulce Rodríguez?", preguntó el alcalde a un medio que le cuestionó antes por la conversación entre esta asesora y Tutor, transcrita por los agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera. "Yo no, no he visto esa parte, no se puede ir por partes", insistió.

Por este motivo, evitó responder claramente a si se producirán relevos en la corporación coruñesa. "¿Por qué vamos a jugar a futuribles si no sabemos lo que nos deparan esos hechos? En un estado de derecho nos ha costado mucho que haya la presunción de inocencia", replicó.

No obstante, admitió que el contenido descubierto hasta el momento y su impacto social "son cosas que no hacen bien". "Los ciudadanos sufren un espectáculo triste con esta instrucción. Entre todos deberíamos ayudar a despejar estas incertidumbres que generan estos capítulos y seriales", dijo el alcalde.

Sí salió en defensa de Flores su compañero en Servicios Sociales, el edil Miguel Lorenzo, que recordó que "pedir por una persona no es delito" y puso "la mano en el fuego" por él. Los investigadores creen que se concedieron enchufes a cambio de contratos, lo que sí constituye un delito.

El PSdeG

Por su parte, la líder del PSdeG en A Coruña, Mar Barcón, salió ayer en defensa de su compañero de partido, el concejal José Nogueira, imputado en el caso Pokemon. La portavoz socialista cree "justificable" que solicitase -tras ganar el PP las pasadas elecciones municipales- al responsable de Vendex en Galicia, José María Tutor, un puesto de trabajo para su hermana, que estaba en paro, tal y como desvelaron los pinchazos telefónicos que ordenó la magistrada Pilar de Lara. "Si usted me pregunta si un concejal en la oposición es corrupto por pedir, seguramente no a una empresa, sino a varias personas, un trabajo para su hermana que estaba en desempleo, creo que eso no es corrupción", alegó Barcón.

La portavoz de los socialistas en a Coruña subrayó que Nogueira estaba en la oposición. "Por lo tanto, no está gestionando y no tiene capacidad de mover ni un contrato ni dar concesiones", destacó. Pero pidió explicaciones al alcalde "tras las informaciones que hablan de la posible existencia de facturas y dinero negro con el que se pagan servicios municipales".