En marzo de 2008, la boya situada en Estaca de Bares batía su récord de altura significante de ola -la media del tercio de las olas más altas- al alcanzar los 12,89 metros. El temporal que acaba de sufrir la costa gallega ha conseguido una nueva medición que le anda bastante cerca: la misma boya ha registrado, según informa Puertos del Estado, una altura significante de ola de 12,8 metros. La culpable en esta ocasión fue la ciclogénesis explosiva "Nadja" y el dato se midió a las nueve de la noche del pasado 1 de febrero, cuando el oleaje que azotó el litoral gallego y cantábrico aún no había destrozado parte del paseo marítimo de A Coruña ni había arrastrado, como sucedió después, a un joven de Foz al mar.

Porque, si bien no llegan a la costa con la misma altura -suele ser menor-, esta vez su magnitud se vio potenciada todavía más al coincidir con mareas vivas.

Con una altura significante de 12,8 metros, es de esperar, estima Puertos, que en Estaca de Bares se hayan registrado alturas de olas individuales de más de 20 metros de altura, el equivalente a un edificio de siete plantas. A la espera de que el gestor portuario realice el mantenimiento de las boyas y extraiga las memorias, este cálculo es solo una estimación: se multiplica por 1,6 la altura significativa para redondear, aunque a veces la regla no encaja del todo con las mediciones recibidas después. Por ejemplo, el récord de Estaca de Bares en ola significante, los 12,9 metros que se alcanzaron en el temporal de marzo de 2008, se correspondió con una altura máxima de ola individual de 19,68 metros, mientras que, en enero de 2009, el "Klaus" consiguió que, pese a que la significante fue un poco menor, de 12,81, hubiera olas individuales que alcanzaron los 20,58 metros de altura, lo que podría repetirse también esta vez.

Por ahora no se puede saber qué ocurre en otra de las boyas de la red exterior de Puertos, la de Cabo Vilán-Sisargas, que no emite datos en tiempo real por el agotamiento de las baterías. Podría estar, señalan desde Puertos, registrando igualmente las mediciones pero sin capacidad para transmitirlas, por lo que tal vez se recuperen cuando el tiempo permita realizar las tareas de mantenimiento. Pese a que la boya no pueda dar testimonio, probablemente también allí se haya notado la agitación de este fin de semana. El pasado 6 de enero, cuando en Cabo Silleiro se medían 11,5 metros -su récord-, allí se llegaba a los 12,7. Además, por ahora Vilán es la que ostenta el récord de haber medido la ola máxima más alta de Galicia: fueron 21,9 metros, en 2009.

Con todo, la de Vilán es la cuarta en el registro de Puertos y del Instituto Español de Oceanografía. Los tres primeros puestos de hitos históricos están copados por boyas del Cantábrico, donde también golpeó el temporal con fuerza. Por ejemplo, la boya de Cabo de Peñas (Asturias) llegó a medir 11,25 metros a las 5 de la mañana del día 2, su segundo registro histórico más alto desde 1998.

Puertos del Estado prevé para hoy y mañana otro fuerte temporal en la costa gallega y cantábrica con una altura significante de oleaje estimada en 10,4 metros.