En temporada de presupuestos, tanto los del Estado, que se debaten a partir de hoy en el Congreso, como los autonómicos, la insistente senda del cumplimiento del déficit marca, otra vez, el debate político. Una constante tras el estallido de la crisis y desde que las autoridades europeas pusieron la lupa en la situación de España. Para las comunidades en concreto, el margen para pedir dinero y compensar su autofinanciación se sitúa en 2016 en el 0,2% sobre su Producto Interior Bruto (PIB), frente al 1% del inmediato 2014 y el 0,7% de 2015. Y ese ajuste es el principal reto que, en mayor o menor medida, tienen por delante. Lo que no quiere decir que el endeudamiento vaya a sufrir la tijera desde ahora. Sigue, aunque a menor ritmo, para, entre otras cosas, afrontar el vencimiento de créditos y emisiones acumuladas en años anteriores, como cualquier hogar al que le llega el fin de plazo de sus préstamos. Toda una cifra récord para la Xunta el año que viene, con 1.720,7 millones de euros en amortizaciones, según refleja el borrador de las cuentas, más del doble -un 111% más, exactamente- que en este 2013.--- NO TOCAR ---

----------------

Siga leyendo la noticia en Orbyt, o suscríbase a Faro de Vigo y tenga acceso completo a todas nuestras noticias sin límites.