El Servizo Galego de Saúde (Sergas) implantará a partir del último trimestre del año un nuevo modelo de atención médica en el que el paciente podrá elegir ser visto en la consulta por el facultativo o atendido por este a través del teléfono. La intención del departamento que dirige Rocío Mosquera pasa por iniciar la aplicación de este sistema por la especialidad de medicina familiar y comunitaria, es decir, por el médico de cabecera de atención primaria. A partir del primer trimestre del año próximo presente extenderlo también a pediatría y enfermería.

Galicia podría convertirse así en la segunda comunidad que aplica este sistema después del País Vasco, si bien las consultas telefónicas con el médico ya se aplican desde hace años en el servicio de urgencias cuando se llama al 112.

El sistema sería el siguiente, según explicó ayer la consellería. Cuando un paciente telefonee a su centro de salud para pedir una cita se le ofertará la posibilidad de una consulta bien presencial, bien telefónica. Si acepta esta última, fijará un día y una hora a la que su médico lo llamará para abordar qué le sucede. Este último determinará si es necesario acudir a la consulta en función de la descripción de la dolencia que realice el paciente. Esta actividad quedará registrada en su historial clínico.

El Sergas defendió ayer este nuevo sistema esgrimiendo una encuesta telefónica con los pacientes que durante un mes disfrutaron de este sistema. Tan solo un 12,1% de las 2.844 consultas realizadas se saldaron sin el ciudadano sentado frente a su doctor, según estos datos. De estos, apenas el 2,5% fueron derivados a una cita presencial en su centro de salud.

Este experimento se realizó en siete centros de salud de atención primaria: Salvaterra, en Vigo; Cerdedo, en Pontevedra; Toén, en Ourense; A Covada, en A Coruña, Ares, en Ferrol; y Baleira, en Lugo.

Sanidade defiende la aplicación de este sistema con especial incidencia en el rural, que registra sendos procesos de envejecimiento y dispersión poblacional, para los que entiende que será útil poder consultar con el médico vía telefónica sin acudir a contarle qué les sucede cara a cara.

Como munición para defender su propuesta, el departamento de Rocío Mosquera mostró los resultados de valoración de la citada encuesta, en la que el 93% de pacientes atendidos consideraron "buena o muy buena su experiencia". Al 95% le pareció "correcto" el tiempo del médico en atenderlo y el 93% "manifestó que le quedaron claras las indicaciones" recibidas. Los profesionales, según Sanidade, también mostraron "una valoración muy positiva". En opinión de este departamento, este sistema "reduce el tiempo de espera, evita el desplazamiento y esperas innecesarias".