De todos los grandes, y los abiertamente interesados en el proceso, solo el BBVA quedaba en confirmar oficialmente su participación en la puja por las nacionalizadas. Su consejero delegado lo hizo ayer. El segundo banco español va a analizar "y va a ver todos los papeles y el libro de información" de Novagalicia y Catalunyabanc. Ángel Cano sostiene que el análisis de ambas operaciones se realizará "buscando la generación de valor para el accionista". , al mismo tiempo que ha descartado que el banco tenga a la venta ningún activo estratégico. De hecho, hace una semana que transcendió que el grupo presidido por Francisco González fichó a Nomura -el banco nipón habitual de los contratos de asesoría en la reestructuración financiera por parte del FROB- para preparar su oferta.

Durante el primer semestre del año, BBVA obtuvo un beneficio atribuido de 2.882 millones de euros, un 90,8% más que en el mismo periodo del pasado año -y por primera vez, superior a los resultados del gigante del sector en el país, el Santander, que ganó 2.255 millones-, impulsado por los ingresos recurrentes y la venta de activos no estratégicos. De hecho, el resultado de operaciones financieras se dispara un 73,4%, hasta los 1.349 millones de euros.

La morosidad del grupo aumentó 20 puntos básicos entre enero y junio y se sitúa en el 5,5%, con una cobertura del 68%, tres puntos menos. "Es difícil adivinar cuándo dejará de subir la mora, pero no lo veremos antes del primer o segundo trimestre de 2014", apunta Cano. La eliminación de la cláusula suelo tras la sentencia del Supremo por hipotecas de BBVA, Cajamar y Novagalicia, supuso un coste para la entidad de 93 millones de euros en el trimestre, de los que 57 millones son de junio.