En un momento en que la agricultura convencional va en claro retroceso, la eclosión de la agricultura ecológica aporta savia nueva al rural gallego. En la última década, casi se ha quintuplicado la superficie destinada a este tipo de productos y el volumen de negocio no para de crecer: de 1.725.000 euros facturados en el año 2002 se llegó a los 22.710.000 euros en el pasado ejercicio.

Galicia es la primera productora nacional de leche ecológica y se encuentra también en los primeros puestos de huevos y pollos, con empresas como Coren en la vanguardia. Leche y derivados generaron más de 9 millones de euros, mientras que la venta de carne ecológica supuso el año pasado casi 3 millones de euros. "Es un tipo de producción que permite al ganadero obtener unas rentas dignas", comenta Javier García, secretario del Consello Regulador da Agricultura Ecolóxica de Galicia (Craega), en el que están registradas más de 600 operadores. Tras destacar que en el período 2010-11 la agricultura ecológica creció un 27% en volumen de ventas certificadas, y del 2011 al 2012, un 3,76%, Javier García señala que la ecoagricultura contribuye a fijar la población en el medio rural, "pues un productor puede vivir de lo que dan sus tierras sin tener que ir a engrosar las listas del paro en la ciudad".

El secretario de Craega no duda en afirmar que "los agricultores ecológicos son los jardineros de la naturaleza", y argumenta que las explotaciones ganaderas evitan incluso incendios forestales, pues "las vacas se encargan de limpiar los montes y los campos sin tener que pagar a las brigadas antiincendios", señala. Añade Javier García que el cuidado de la biodiversidad es un concepto muy importante en la agricultura ecológica.

De cara al futuro, el objetivo del Consello Regulador es difundir entre los consumidores gallegos las ventajas de la agricultura ecológica, porque en la actualidad "más del 50 por ciento de la producción certificada en Galicia se va fuera de España". Uno de los retos, por tanto, es que se consuman más productos certificados en Galicia. En cuanto a la promoción internacional, su cita más importante está en la feria de alimentación de Anuga, en Colonia, la más grande de Europa. También pretenden organizar ferias ecológicas en distintas capitales de Galicia.

Aunque el consumo de estos productos de calidad no va en Galicia parejo a la producción, poco a poco se van notando avances. Por ejemplo, en Vigo acaba de abrir el primer supermercado ecológico, ABC de Bio, que se suma a los que ya existían en A Coruña y Santiago.

España es el principal país europeo de producción ecológica, y uno de los primeros del planeta. Respecto a la situación de la agricultura ecológica de Galicia en relación con otras comunidades, Javier García comenta que "nos encontramos en una zona intermedia, muy por debajo de comunidades como Andalucía, que tiene más del 50 por ciento de la superficie certificada de toda la península Ibérica. Eso sí, en la producción de leche somos los primeros, y estamos también en los puestos de cabeza en huevos y pollo". Sin embargo, la producción hortícola en nuestra comunidad es meramente testimonial.

Premio internacional

Las galletas de nata de la Granxa Maruxa, de Monterroso, acaban de obtener dos estrellas en el certamen de cata a ciegas del Internacional Taste&Quality Institute (iTQi), una entidad con sede en Bruselas formada por chefs y sumillers de todo el mundo, que se dedica a catar y promover alimentos y bebidas de calidad. Las responsables de Productos Ecolóxicos Granxa Maruxa, Marta Álvarez Quintero, Mercedes Guerrero y Chus Formoso, recogieron el galardón el pasado 30 de mayo, vestidas de gallegas. Las galletas empezaron a comercializarse hace tres años y ya han recibido tres galardones, pues al Taste&Quality hay que sumar dos premios de ámbito nacional, el de Innovación y el de Alimentos de España.

Empezaron asistiendo a ferias de la comarca de la Ulloa y poco a poco fueron dándose a conocer. "Hacemos todo nosotras de forma artesanal: la elaboración, el envasado y la comercialización en 200 puntos de venta de toda España. No trabajamos con distribuidores ni vendemos a grandes superficies", explica Mercedes Guerrero.

Se trata de galletas elaboradas con la leche de las 48 vacas de la granja. "Solo llevan nata, azúcar de caña ecológico y harina de trigo ecológica molida en molinos de piedra", añade Mercedes. Una producción artesanal de unos 40 kilos al día, porque tampoco les interesa crecer mucho ya que va en función de las vacas que tienen en la explotación.

La viguesa Marta Álvarez, hija de la fotógrafa Mary Quintero, empezó con la explotación de vacas en el año 2000 y ahora cuenta con un total de 48 cabezas de ganado. La granja es completamente ecológica, tanto la producción animal como vegetal; la leche la venden al por mayor y con la nata elaboran sus famosas galletas.

Si algo está claro es que las vacas de Granxa Maruxa no padecen estrés, pues su dueña les pone música clásica para que descansen mejor. "Hay un estudio -apunta Marta- que constata que las vacas que escuchan música clásica producen una leche más dulce".

La producción ecológica es más cara, porque supone unos mayores cuidados medioambientales. Pero el control por parte del Consello Regulador, Craega, es absoluto; de hecho las etiquetas van numeradas. "Si te dedicas a la tierra, tienes que cuidarla. Me da grima cuando veo que plantan maíz y echan herbicida al lado… Estamos envenenando al planeta", concluye Marta.

26.000 gallinas

La cooperativa Avega, de Agolada, se creó en el año 2002 con el objetivo de producir y comercializar huevos ecológicos. En la actualidad tiene 26.000 gallinas que se alimentan con piensos de cereales ecológicos.

Desde el año 2004 la cooperativa produce también piensos ecológicos para todo tipo de animales. Y un año más tarde, en 2005, sus responsables apostaron por una nueva línea de productos y empezaron a comercializar queso ecológico de leche de vaca. Como señala Alfonso Vence, responsable de Alimentación de Avega, "nuestra actividad fuerte es el huevo de consumo ecológico; empezamos con 700 gallinas y ahora tenemos 26.000, repartidas en cuatro naves. Tenemos una en el concello de Silleda, otra en Paradela (Lugo), una más en Entrimo (Ourense) y otra alquilada en la localidad lucense de Palas de Rei". Además de las gallinas, en Avega están realizando pruebas para la cría de pollos, gallos y capones ecológicos.

En cuanto a la aceptación de los productos ecológicos, Alfonso Vence señala que la producción en España ha crecido un 7% en 2012 y "el 40 por ciento de los huevos ecológicos que hay en el mercado nacional sale de Galicia", que pronto se ampliará porque en el plazo de unos meses inaugurarán una nueva nave de producción en Rodeiro.

Leche, quesos y yogures

Casi 200 vacas de ordeño pastan en la granja familiar Casa Grande de Xanceda, en Mesía, a medio camino entre A Coruña y Santiago, donde desde 2002 su ganadería presume de certificado oficial ecológico. Es una de las mayores productoras de leche ecológica de Galicia con entre 950.000 y 1.150.000 litros anuales. Además comercializa otros productos derivados de la leche, como yogures, queso o mantequilla.

Por su parte, Granxa Arqueixal, situada en la localidad lucense de Palas de Rei, inició su producción ecológica en el año 2002 con la elaboración de quesos, a la que ahora se suma también la elaboración de yogures y la venta de leche fresca. "Tenemos 35 vacas en producción, y el 80 por ciento de la leche se destina a elaborar quesos ecológicos; el resto se reparte entre los yogures y la leche fresca", explica Luis Carrera, responsable de la granja. La distribución se centra en la venta directa y local, aunque sus productos llegan también a grandes centros comerciales de ciudades como Madrid o Barcelona.

En los últimos años Luis Carrera observa una creciente aceptación de los productos ecológicos entre los gallegos, aunque es consciente de que este "consumo de calidad" todavía no está a la altura del que se da en otros países europeos. En cuanto a los posibles clientes, el responsable de Granxa Arqueixal señala que "la gente mayor los prefiere para cuidar mejor su salud, mientras que entre los jóvenes influye también su preocupación por el cuidado medioambiental".

Carne de vacuno y porcino

Samanta Barreira tiene en Vilardevós (Verín) una explotación ecológica de vacas de raza vianesa, unos 70 animales contando los becerros. "Criamos y vendemos directamente la carne y además hacemos selección de raza", explica Juan Barreira, el padre de Samanta, que añade que "las vacas se crían en el monte y se alimentan de pasto, y el 80% de la alimentación de los becerros es a base de leche, y el resto hierba; no los cebamos con piensos". Suelen matar a los becerros para la venta cuando tiene entre 7 y 8 meses. Por las condiciones naturales de la cría, "la carne tiene un sabor especial, y de hecho quienes nos compran suelen repetir por la calidad que ofrecemos".Lamenta Juan Barreira que en Galicia faltan zonas de pasto, "lo que nos hace menos competitivos porque se encarece el producto final".

Entre los operadores ecológicos son frecuentes las pequeñas explotaciones. Es el caso de Camilo Lorenzo Ferro, de Padrón, que se dedica a la cría de porcino. Inició su actividad hace unos tres años y cuenta con cuatro cerdas y un macho, y una producción anual de 70 lechones. "La alimentación de los cerdos es totalmente natural: hierba, legumbres, cereales… nada de piensos artificiales", comenta Camilo. Salvo algunos que destina a ceba, la mayoría de los lechones los vende para cría a particulares. En la actualidad cría a 33 lechones, y para octubre o noviembre tendrá otros 30 o 40 para la venta.

Por otra parte, un grupo de agricultores de Rairiz de Veiga (Ourense) amantes de la naturaleza comercializan sus productos de horticultura bajo la firma Daiquí, que recibe el nombre de un proyecto rural sostenible que nació en el año 1996, de la mano de militantes del M.E.L (Movimiento Ecologista de la Limia), con la intención de demostrar que el sistema agrario tradicional gallego es un patrimonio muy valioso.

Son algunos ejemplos de un nuevo tipo de agricultura que está en pleno auge y que cada día cuenta con un mercado más amplio, también en Galicia.