El fin de semana será caluroso, con temperaturas normales, o ligeramente por encima de las normales y no se esperan precipitaciones en la mayor parte del país, aunque a partir del lunes, una borrasca que entrará por Galicia dejará lluvias y descenso de las temperaturas, en una situación que podría durar hasta el jueves, cuando termine la primavera, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Según ha explicado a Europa Press el portavoz de la Aemet, Alejandro Lomas, este sábado se podría registrar alguna tormenta en Pirineos y, por la tarde, también en Navarra, La Rioja y Aragón. En el resto de España se espera un día poco nuboso y con ausencia de precipitaciones, y los termómetros comenzarán a descender ligeramente aunque se mantendrán en valores normales.

Concretamente, las temperaturas descenderán por el Cantábrico oriental y Alto Ebro, en la zona de La Rioja, Alava, Navarra y norte de Burgos. En todo caso serán "significativamente altas" con valores de entre 35 y 38 grados centígrados en Andalucía, parte de la meseta sur, Extremadura, Murcia y sur de la Comunidad Valenciana. Estas temperaturas activarán los avisos de riesgo por altas temperaturas en la meseta sur, Córdoba y Murcia.

Por su parte, en la mitad norte, los termómetros serán más frescos ya que, por ejemplo en Santander se esperan unos 19 grados centígrados el sábado, 24 grados centígrados el domingo y 17,5 grados centígrados el lunes. En Burgos, el sábado se esperan unos 23 grados centígrados y unos 28 el domingo. En Valladolid, el domingo se pasará de 32 grados centígrados y en Zaragoza se llegará a 34 grados centígrados. "Tal vez no llegarán a 30 grados centígrados en el norte de Castilla y León y en la franja cantábrica, así como en Galicia", ha precisado.

El portavoz de la Aemet ha indicado que el domingo "aún hará calor" pero se acerca una borrasca no muy activa por Galicia que entrará en la Península. Sin embargo, ha explicado que aún no se sabe con precisión la trayectoria que tomará ni la velocidad que tendrá pero sí que provocará un descenso de las temperaturas y un aumento de la inestabilidad.

Por ello, espera que el domingo las temperaturas sean significativamente altas en la mitad Sur y que en el litoral de Galicia se produzcan lluvias moderadas y que se irán extendiendo hacia el interior a lo largo del día. Ese domingo, las nubes de evolución diurna también afectarán al sistema ibérico y Pirineos, donde podría haber alguna tormenta.

Lunes más fresco

Respecto al lunes, Lomas prevé que los termómetros caigan de forma "asegurada" entre 6 y 10 grados en la mitad Oeste, pero aún no conoce con certeza la trayectoria de las precipitaciones aunque parece que habrá lluvias débiles o localmente moderadas en Galicia, Cantábrico y Pirineo occidental que podrían ser "localmente fuertes en Navarra".

El martes, ha dicho que las temperaturas seguirán descendiendo y afectará también a la mitad este y se podrá formar alguna tormenta y chubasco. El portavoz de la Aemet ha dicho que hay dos escenarios en esta borrasca, el primero que las bajas presiones sean débiles y que su trayectoria sea más lenta, en cuyo caso la situación durará hasta el jueves o el viernes, o bien, que evolucione de forma más rápida y la situación termine el miércoles.

En todo caso, una vez termine, bien el último día de la primavera o el primero del verano, que llegará a las 5.04 horas del viernes 21 de junio, las temperaturas volverán a ser normales para la época, lo que significa que, por ejemplo en Sevilla, pasarán de largo los 30 grados centígrados.

En este contexto, el portavoz de la Aemet ha adelantado que, aunque aún faltan datos y predicciones a largo plazo como la del Centro Europeo, parece que el periodo estival tendrá un carácter normal, es decir que las temperaturas serán altas y las precipitaciones escasas, ya que, de momento, nada permite observar que la situación vaya a ser anómala.

Balance hídrico

En cuanto al balance hídrico, Lomas ha dicho que en lo que va de año hidrológico (1 de octubre de 2012 a 30 de septiembre de 2013), hasta el 11 de junio ha llovido 691 litros por metro cuadrado en España, un 29 por ciento más que el valor normal, que son 535 litros por metro cuadrado.

Lomas ha indicado que la mayor parte del país cuenta con superávit y que este superávit es del 75 por ciento en Navarra, La Rioja, País Vasco, Alto Ebro, Ciudad Real, una zona muy amplia de Jaén y parte de Córdoba y Granada. Por su parte, Andalucía oriental, menos Almería, registra un superávit de lluvias de entre el 175 y el 200 por ciento, lo que significa que ha llovido el doble de lo normal.

En general, ha dicho que casi toda España tiene superávit salvo alguna zona de Murcia y algún punto del interior y las islas orientales de Canarias (Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote), donde el déficit supera incluso el 50 por ciento en algunas zonas. En Murcia, ha llovido un 75 por ciento de lo normal, por lo que el déficit es del 25 por ciento.