A la espera del beneplácito definitivo de las autoridades europeas para completar la adjudicación, y que previsiblemente llegará antes del verano, el Sabadell trabaja ya mano a mano con los directivos del Gallego en la unificación del negocio. Un proceso que se alargará hasta finales de este año o principios del próximo 2014 y con el que el equipo liderado por José Oliu logra su ansiada "plataforma" para crecer en una comunidad que miraba con mucho apetito. En el mismo momento de conocerse su victoria en la subasta exprés del FROB, el banco catalán pronosticó un ajuste "mínimo" en Galicia, donde suma con la operación 117 oficinas a las 28 que tenía. En total, 145, entre las que podría haber "algún cierre", de cualquiera de las dos, por redundancias "puntuales" y que sumarán hasta otro medio centenar conforme se consolide el proyecto. El Sabadell ve margen para alcanzar una red de 200 sucursales aquí.

El análisis del reparto de sucursales está finalizado, según confirman fuentes de la entidad. En línea con lo esperado. Ese impacto anecdótico en Galicia, con una reducción más importante a aplicar en Madrid -el banco catalán cuenta en la capital con 205 y el Gallego con 28- y la mayor tijera para las 38 restantes repartidas por otras comunidades.

Al reciente nombramiento de José Manuel Oliver Martínez como administrador provisional por parte del FROB para "facilitar" la resolución del Gallego, le seguirá próximamente la entrada en su consejo de administración de varios miembros designados por el Sabadell. Probablemente sean tres, el presidente Oliu entre ellos. La dirección general sigue a cargo de José Luis Losada para "dar continuidad" en la gestión. Y los nuevos dueños de la entidad destacan que la colaboración es "total".

El Sabadell participa en el día a día de la política comercial del Gallego para "coordinar" la actividad en ese camino hacia el desembarco de su catálogo de productos y la operativa. Lo que marcará el cierre en la práctica de la operación y el pistoletazo de salida a las aspiraciones del comprador de seguir arañando cuota de mercado.

Hay otra incógnita pendiente. El de la marca. El banco catalán trabaja en Galicia con la marca Sabadell Atlántico y la premisa de que no haya una enseña doble. Por eso su equipo de marketing mantiene en estos momentos abierto un grupo de discusión -focus group, en jerga publicitaria- sobre la potencialidad de cada nombre y las variantes posibles, incluido el mantenimiento de parte del nombre del Gallego.