No es un caso único pero sí el más reciente. El presidente de la Diputación, Rafael Louzán, desvelaba ayer que dos pontevedreses incluyeron en sus respectivos testamentos a la institución como coheredera de sus fortunas, que incluyen pisos, "cuantías económicas importantes" -entre ellas algunas "sujetas a productos híbridos (preferentes)"-, muebles, vajillas, alguna obra de arte y otros bienes. Aunque está por cuantificar con exactitud el monto global de las donaciones y su disponibilidad, se sabe que uno de los legados, que habrá que repartir con varios sobrinos de la fallecida, rondaría los 3,5 millones de euros.

Ambas herencias -compartidas en un caso con familiares y en el otro con otras tres instituciones y entidades- están siendo analizadas por expertos de la Diputación de Pontevedra para valorar si aceptarlas puede derivar en ulteriores contenciosos testamentarios y el tipo de cargas que puedan tener los bienes.

"Estamos elaborando un informe por lo que no se puede avanzar muchos más, pedimos información al Registro y a los bancos", señaló Louzán, que se escudó en este hecho para no identificar a los benefactores, ya que la Diputación no ha decidido todavía si aceptará el "regalo" y además al menos en uno de los casos se expresó el deseo de mantenerse en el anonimato.

En este proceso de análisis, aunque en un estadio más avanzado, se halla también la herencia legada por una mujer nacida en Cotobade y que vivió gran parte de su vida en Madrid. Tras fallecer en el último trimestre de 2012, habría dejado varias propiedades inmobiliarias a la institución provincial.

El Museo también hereda

El presidente de la Diputación de Pontevedra conocerá, no como hasta ahora de interlocutor de las víctimas, sino de primera mano, como afectado directo, la problemática de las preferentes ya que "cuantías económicas importantes" de una de las herencias legadas a la institución "están sujetas a productos híbridos financieros". Se trata de la donación hecha por la pontevedresa que ha decidido dejar su patrimonio a cuatro instituciones y entidades benéficas, entre ellas el Museo de Pontevedra y Cáritas.

"No se puede avanzar más información", explicaba ayer el presidente provincial, ya que habrían contactado con la entidad bancaria para conocer qué posibilidades tienen de recuperar y en qué cantidad los ahorros que la fallecida ha decidido legar a cuatro instituciones.

La liberación de los ahorros cautivos de la donante es una de las preocupaciones de la institución, pero no la única, pues antes de dar el sí a la transmisión patrimonial, la Diputación comprobará el Registro de la Propiedad y en los demás bancos en donde están depositados fondos de los benefactores.

Las donaciones llevaron a Louzán a reconocer públicamente a los "muchos" ciudadanos que "de manera altruista" contribuyen a engrandecer el Museo y la Diputación de la que dependen centros asistenciales como la Ciudad Infantil Príncipe Felipe.

A la institución provincial, como tal, menos, pero en el caso del Museo las donaciones y mecenazgos han sido y son habituales. Según confirmaban ayer fuentes oficiales, entre sus más de 18.000 asientos (adquisiciones, donaciones, depósitos?) se encuentran "varios cientos" de donaciones, entre ellas un porcentaje importante de carácter testamentario. Además de instituciones, familias pontevedresas y gallegas, de origen o de adopción, como las de Fernández de la Mora, Sánchez Cantón, Odriozola, García Alén, Filgueira Valverde, Fernández López, Perfecto Feijóo, Víctor Said Armesto, García Solís, Sobrino o Méndez Babiano dejaron escrito su nombre en el Museo de Pontevedra por el legado de algún miembro.