La Corporación de Gondomar acordó ayer por unanimidad declarar no grata a Novagalicia Banco y a las entidades que hayan vendido preferentes y subordinadas en el municipio. Lo hizo en el primer pleno monográfico sobre la estafa bancaria en Galicia, en el que intervinieron portavoces de los afectados con una exposición sobre el "robo de las quitas" y la necesidad de agilizar el arbitraje.

El debate se calentó cuando un edil del PP y otro independiente reprocharon a un concejal de Anova haber vendido preferentes durante su etapa como director de una sucursal de Caixanova y éste pidió disculpas públicas. Finalmente los afectados calmaron la discusión al recordar que la solución está en manos del Gobierno.

Todos los ediles votaron a favor de exigir al FROB que investiguenlas cuentas de las cajas y se querelle si hubo administración desleal o falsedad en los balances, de reclamar la exención de tasas judiciales en los procesos por este conflicto y de solicitar al Gobierno que modifique la ley para impedir las quitas.