Las cifras suponen el mínimo histórico que registra el Colexio Oficial de Arquitectos de Galicia (COAG). El año pasado, en toda la comunidad, estos profesionales solo visaron 3.446 viviendas, lo que representa un 26 por ciento menos que aquellas a las que habían dado el visto bueno en 2011, un año tan malo que los arquitectos creyeron que habían "tocado fondo".

Jorge Duarte, el decano en funciones del COAG, se mostró "muy pesimista" en la que probablemente fue su última comparecencia pública como responsable de los arquitectos -precisamente hoy estos técnicos elegirán una nueva directiva-. La cifra de viviendas construidas el año pasado en la comunidad, recordó, apenas representa un siete por ciento de las que se edificaban en 2006, el momento en el que más se notó en Galicia el boom de la construcción, con 46.881 viviendas autorizadas. "La desconfianza en los mercados y la falta de fluidez del crédito hacen que este período de crisis en el sector se prolongue más de lo deseable", lamentó. Hasta que ese crédito se recupere, no atisba un cambio de tendencia. De hecho, para este año augura otro balance estadístico negativo.

El decano de los arquitectos reconoció que, sobre todo en zonas costeras como A Mariña lucense o el Barbanza, existe "un stock muy grande de viviendas", pero se trata, avisó, de "segundas residencias". Frente a eso, desde el Colexio estiman que se necesitan entre 15.000 y 20.000 viviendas nuevas por año en las ciudades y para primera residencia. "Esa vivienda a precio razonable es lo que hoy en día demanda la población y lo que echa de menos el sector de la construcción", explicó, para añadir que el paro, que supera el 50% entre los trabajadores del sector. "Si hubiera financiación, existe demanda de nueva vivienda", reiteró.

Duarte considera que no hay crédito para promotores y que los datos de vivienda de protección oficial, por ejemplo, son "lamentables" y "preocupantes", ya que solo se contabilizaron 41 visados de este tipo durante el año pasado. "Es el 1% de la cifra más pequeña de toda la última década", avisó.

Los arquitectos defienden ante este panorama a través de su portavoz el "volver la mirada sobre acciones de rehabilitación y mantenimiento". En este ámbito, las cifras muestran un tímido repunte, de un 14%, respecto al año pasado, aunque las cifras absolutas, subraya, "siguen por debajo de las peores de la década".

Para Duarte, esta tendencia "alternativa" a la construcción de nueva edificación se puede consolidar si se da una "apuesta clara y decidida" por la rehabilitación y se fomenta desde la Administración a través de ayudas -igual que se dan al naval o a la construcción, alegó- que servirán, reitera, para mantener una mano de obra especializada que es la que más sufre el paro desde el inicio de la crisis. No tienen, indicó, por qué ser "importantes" cuantitativamente, sino "incentivar" esta apuesta entre las comunidades de propietarios.

Sobre todo, argumentó, porque muchos edificios, construidos en la década de los 50 y 60, notan ya los achaques de la edad, por lo que su rehabilitación debería ser abordada de modo integral tras una auditoría, que podrían realizar los estudios de arquitectura, y teniendo en cuenta las obras destinadas a mejorar la eficiencia energética. En ese sentido, adujo que la Xunta hace esfuerzos "puntuales" a través del Inega, "pero" cree que "el camino no es ese", sino el abordaje integral y que las ayudas "se concentren en un único departamento".

Las estadísticas de 2012 del COAG muestran que no solo disminuyó el número de visados -en sus dos terceras partes de viviendas unifamiliares-, sino que también lo hicieron la superficie media de los inmuebles y el coste. Por provincias, Ourense es la que menos actividad registró, con 307 visados, seguida de Lugo, con 493. A Coruña encabeza el número de autorizaciones, con 1.467, mientras que en Pontevedra fueron 1.179. En 49 municipios, sobre todo de Ourense y Lugo, no hubo ningún visado.