La morosidad del crédito concedido por la banca en España a hogares y empresas volvió a subir en enero, hasta el 10,78%, tras el breve paréntesis de diciembre, cuando cayó casi un punto, al 10,44%, por efecto del traspaso de activos tóxicos a la Sareb. De esta forma, la tasa de impagos retoma la senda ascendente tras cerrar el año 2012 con el primer descenso después de diecisiete meses de subidas ininterrumpidas que lo situaron en su tasa más baja desde julio de 2012.

A finales de enero el Banco de España informó de que el traspaso de los activos inmobiliarios de las entidades nacionalizadas a la Sareb había provocado una caída de 54.000 millones de euros en los créditos concedidos por las instituciones financieras a familias y empresas en 2012. Sin embargo, la diferencia entre la cartera crediticia que acumulaba la banca en noviembre y la que tenía en diciembre es superior, cerca de 80.000 millones de euros, porque la Sareb compró los activos inmobiliarios con importantes descuentos sobre su valor en libros, que de media son del 63%.

Hasta el pasado mes de enero, los préstamos en vigor sumaban 1, 583 billones de euros, de los que 170.690 millones eran dudosos. Son 3.200 millones más que en diciembre, un alza que roza el 2%, pese a que el volumen total de crédito concedido cayó un 1,27%, en más de 20.400 millones de euros.