El PP combinó ayer los ataques a Blanco con la prudencia. Desde las filas populares gallegas, su portavoz, Paula Prado, declaró que "no sería lo más adecuado que esta persona pudiese ostentar un cargo público, no solo de futuro sino de presente", en alusión a la imputación de Blanco, si bien ella misma defendió la continuidad del alcalde de Santiago, Ángel Currás, también imputado en dos causas. Prado preguntó al PSOE "qué línea" adoptará para "dar ejemplo" contra la corrupción, si bien aseguró que respeta la presunción de inocencia.

Por su parte, el portavoz del grupo del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, evitó dar "consejos" al PSOE, pero recordó que la Cámara Baja aprueba normalmente los suplicatorios judiciales para procesar a diputados. En unos días, votará la petición para juzgar al popular Vicente Ferrer por conducir ebrio. En la pasada legislatura se aprobaron tres suplicatorios más.