El capitán de la Marina Mercante y profesor de la Universidad de La Coruña (UDC) Felipe Louzán ha argumentado que abrigar el 'Prestige' en el seno de Corcubión habría "salvado con toda seguridad" al buque, la carga y "a los 2.900 kilómetros de contaminación de costa de España, Francia y Portugal" afectados por el vertido de fuel.

Por otra parte, ha subrayado, en el juicio por la catástrofe, que el rumbo noroeste 330 que las autoridades españolas ordenaron el 14 de noviembre de 2002 -un día después del accidente- "triplicó en 12 horas" los daños del buque. "Era el peor que se podía elegir", ha dicho este perito propuesto por Nunca Máis.

En su declaración, ha recalcado que era un rumbo que llevaba el barco "a Groenlandia", hacia el temporal y que también "debilitaba la estructura" del buque. "Era un rumbo de hundimiento", ha insistido este perito quien ha precisado que "cuánto más alejado" está un vertido de fuel, es "mucho mayor" el impacto en la costa.

Por el contrario, ha defendido el refugio en el seno de Corcubión y factible que el 'Prestige' llegase a esta zona en "9 o 10 horas". Sobre esta ensenada, ha dicho que era "totalmente óptima" para abrigar el barco y ha descartado que los vientos hubiesen dificultado la operación.

Al hilo de ello, ha señalado que reunía "los parámetros" para el refugio por disponer de "una entrada amplia" de bocana, por el calado "amplio" y porque el fondo "es de buena calidad", en alusión a la arena existente.

"Error" en la gestión

Por otra parte, este perito ha cuestionado que el día 14 noviembre no se enviase al barco un inspector para evaluar los daños del buque. A su juicio, descartada "la imposibilidad material" de hacerlo por la presencia en el mismo de personal de la empresa de rescate Tecnosub, debían haber ido "varias personas". No hacerlo, supuso, en su opinión, "el inicio del error en la gestión de toda la crisis", ha sentenciado.

Además, ha señalado que, sino se quería dar abrigo al barco, "la única alternativa" para el buque era "rumbo Sur", ha precisado en contraposición con las órdenes dadas por las autoridades españolas.

Asimismo, ha sostenido que por parte de éstas "se despreció el conocimiento" del capitán, Apostolos Mangouras, cuya decisión de lastrar los tanques con agua para corregir la escora ha considerado la "única posible" en una situación "de emergencia".

Informe del perito judicial

Antes de su testimonio, ha prestado declaración el también capitán de la Marina Mercante, José Manuel Fernández Hermida, perito judicial nombrado por el Juzgado de Corcubión que instruyó la causa del 'Prestige'.

En su interrogatorio, el abogado del capitán, José María Ruiz Soroa, ha puesto en duda el contenido del informe aportado por este perito, en concreto el capítulo relativo a las revisiones del 'Prestige' en Dubai.

Soroa ha argumentado que había una coincidencia del "86%" en un capítulo de los informes aportados por el también perito Charles Cushing, "incluidas faltas de ortografía", ha apuntado, a lo que Fernández Hermida ha replicado que no tenía una explicación al respecto.