El nuevo secretario xeral del PSdeG saldrá de un congreso extraordinario de delegados. La intención de Pachi Vázquez, actual líder socialista en Galicia, de convocar un proceso de primarias fue respondido con contundencia por parte de Ferraz. La dirección nacional del PSOE envió a Santiago un documento -además de una carta de Óscar López, secretario de Organización- que pretende desactivar no solo la intención galaica de consultar a la militancia, sino que esta sirva de detonante para que el resto de federaciones inicien procesos similares y acaben arrastrando a Alfredo Pérez Rubalcaba a convocar un proceso similar a nivel estatal.

Ferraz recordó a la dirección del PSdeG que el "único procedimiento establecido y reconocido por la normativa interna del PSOE y del PSdeG" es la elección de nuevo líder mediante un congreso de delegados. Su toma de posición se produjo el mismo día en que Vázquez anunció a la ejecutiva del PSdeG su intención de convocar unas primarias informativas el 1 de junio y un congreso extraordinario el 1 de julio. "No incumplimos ninguna norma y Madrid no puede impugnarlo. Además, oponerse a consultar a las bases es un error de Rubalcaba, es un proceso que no puede pararse", apuntan fuentes de la ejecutiva gallega.

Vázquez quiere preguntar a la militancia qué candidato prefiere para llevar las riendas de un PSdeG que con 18 diputados se dejó 7 en las últimas elecciones. Una vez realizada la consulta, sin carácter vinculante, convocará un congreso. En él, tácitamente los delegados de cada agrupación deberían asumir el voto de sus bases como propio. "Eso no son unas primarias. Ferraz las ha tumbado y Vázquez quiere realizar esta maniobra dilatoria para quedar bien, como que quiso preguntar a la gente y no pudo, pero sabe que no es legal y no son unas primarias. Esto no será una consulta ni nada", apuntan voces críticas con el secretario xeral de los socialistas gallegos.

Galicia será la primera federación socialista en plantear un pulso a Ferraz si convoca las primarias, incluso con esta fórmula descafeinada. Y eso que la dirección estatal está más pendiente estos días de la tensión con el PSC que de Galicia, cuyo deseo de consultar a las bases ya ha sido emulado por la Comunidad Valenciana. La brecha ya existe antes de que Madrid aumente su tamaño. Los críticos con Vázquez consideran un "paripé" las primarias porque no responderán realmente a la voz de la militancia.

Los partidarios del líder del PSdeG, sin embargo, consideran que exprimirán el vacío en los estatutos socialistas para realizar las primarias consultivas, el máximo posible con unos estatutos que solo contemplan esa fórmula para designar candidato a presidir la Xunta. En el último congreso estatal Vázquez apoyó a Rubalcaba, que ha aplazado a 2014 la reforma de las normas internas del partido que regulan este método de elección.

Los afines a Vázquez incluso amenazan y sostienen que el proceso es imparable. "Si Madrid frena esta vía, al menos una decena de agrupaciones no enviará delegados al congreso, como Ponte Caldelas, Teo, Cuntis o Caldas", apuntan fuentes socialistas.

Será el Comité Nacional de mañana del PSdeG el que plasmará la voluntad de los socialistas gallegos. Vázquez anunciará ahí sus planes, si bien ayer, tras la ejecutiva, adelantó que está perfilando "los últimos flecos" de una consulta para que "todos los militantes puedan votar", si bien se cuidó de no pronunciar el término primarias y matizó que Galicia no quiere "confrontarse" con Ferraz. Esta fórmula recibió el respaldo de los tres barones provinciales presentes en la reunión: José Ramón Besteiro, Francisco Caamaño y Raúl Fernández.