Aunque poco a poco la letra pequeña del banco malo va saliendo a la luz, sobre todo porque los plazos son muy contundentes y hasta el FMI pide "mucho empeño" para cumplirlos, lo cierto es que hay cuestiones de fondo pendientes todavía de clarificarse. Y los máximos responsables del FROB lo reconocían en la presentación de las condiciones generales de la Sareb el pasado lunes. ¿Como se formalizará el traspaso? ¿A qué precio se venderán estos 60.000 millones de euros en activos? ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿A quién? Al fin y al cabo, estamos hablando de la mayor inmobiliaria que habrá en este país, financiada con dinero público.

El descuento medio del 63%. Ése es el porcentaje medio de la rebaja sobre el valor en libros de los activos en su respectiva entidad, y que oscila entre el 32,4% que se aplicará concretamente a los préstamos ligados a vivienda terminada y el casi 80% previsto para el suelo adjudicado. Los cálculos se han establecido en función de la radiografía de pérdidas previstas por Oliver Wyman en los test de estrés y la suma de un montón de variables, como la antigüedad de la tasación, su ubicación geográfica, las transacciones que acumula cada banco e, incluso, los costes de gestión que tienen que ser asumidos ahora por la Sareb.

Las diferencias con las inyecciones de capital. ¿Por qué Novagalicia, que traspasa 7.200 millones en valor neto, solo logra rebajar unos 500 millones de los 7.176 que, según las pruebas de resistencia, arrastra de déficit de capital? El mayor descuento se da en los activos adjudicados, por encima de los 4.000 millones que pasan a ser valorados en unos 1.200 debido a su estado, el tiempo que llevan sin venderse, su localización... Esa diferencia podría amortiguarse con el refuerzo de provisiones que marcaban los dos reales decretos del ladrillo impulsados por Economía. Pero NCG no los llegó a cumplir. Ahí está una de las claves de que ahora tenga que afrontar esa enorme diferencia de precios, junto a los otros 4.000 millones que distancian sus alrededor de 10.000 millones en crédito promotor y los 6.000 a los que se reduce su valoración para pasarlos a la Sareb. A ambos se suman las necesidades adicionales que puedan existir en recursos propios o la cobertura de otros activos dañados por la crisis.

¿Y esos serán los precios de venta? Probablemente no. El Gobierno quiere que el banco malo sea rentable y su previsión es que lo sea entre un 14% y un 15% "en un escenario conservador". El plan de negocio preliminar que se está diseñando a 15 años vista tendrá que tener en cuenta la capacidad para retener determinados activos durante un tiempo y esperar a que el mercado esté dispuesto a pagar más.