La Consellería de Educación e Cultura recupera el proyecto de un teleférico entre Santiago y la Cidade da Cultura como una de las vías para potenciar las visitas al complejo del monte Gaiás y facilitar así el desplazamiento de los turistas debido al pronunciado desnivel entre los dos emplazamientos. Así se recoge en el plan estratégico que hoy presentará en el Parlamento el conselleiro, Jesús Vázquez, en el que detallará los usos y la explotación de las instalaciones.

El teleférico se impone como una "opción viable" de comunicación frente a otros mecanismos planteados, como un ascensor inclinado o escaleras mecánicas, ya que aparte de cumplir con su cometido como modo de transporte, se recoge en el plan estratégico 2012-2018, funcionaría también "en sí mismo como un atractivo turístico".

En el documento, que se entregó ayer a la presidencia del Parlamento, se recuerda que ya se hicieron distintos estudios al respecto, que si bien al principio planteaban dos líneas de teleférico, finalmente se decantaron por una sola, debido al menor coste de construcción y explotación. El proyecto inicial, con las dos líneas, estaba valorado en 20 millones de euros, pero en el plan estratégico no se detalla ninguna cantidad sobre el presupuesto del proyecto.

Los accesos a la Cidade de Cultura son motivo de preocupación para la Xunta, pero no por la distancia con Santiago, sino por los fuertes desniveles que hay que superar y sobre todo porque el objetivo es consolidar a partir de 2015 una cifra anual de medio millón de visitantes. Por ello, además del teleférico, el Gobierno gallego propone realizar sendas peatonales en zig-zag para facilitar la comodidad de los viandantes, carriles para bicicletas o un mejor servicio de transporte público. A ello se une la demanda de una conexión con la AP-9 como un "enlace vital" para el tráfico privado.

Para favorecer que el acceso peatonal al Gaiás, dado que el 24% de los visitantes que llegan a Santiago lo hacen andando, la Xunta quiere instalar consignas y taquillas por la ciudad para que los peregrinos puedan dejar guardadas sus pertenencias.

El plan estratégico también detalla el modelo de explotación económica, aunque las grandes cifras ya fueron avanzadas el pasado viernes por el conselleiro de Cultura. La idea es que los gastos de mantenimiento y de acción cultural no superen al año los 10 millones de euros, de los que la mitad, sobre 4,5 millones, serían aportados por la Xunta mediante subvenciones.

La Fundación de la Cidade da Cultura contribuirá con 2,5 millones procedentes de donaciones y patrocinios, a los que se sumarán otros 0,9 millones por la venta de entradas para acceder al complejo y visitas guiadas y 350.000 euros en concepto de compensación por parte de la Xunta por utilizar los espacios del Gaiás.

El Gobierno gallego prevé ingresar algo más de medio millón de euros por el alquiler o concesión de espacios a la empresa privada y 72.000 euros por las tasas que paguen los empresas culturas que utilicen el "vivero". Para gastos de personal se prevén 756.000 euros al año.