La Xunta empezará a cobrar a partir del mes de julio el canon del agua, una nueva tasa con la que se pretenden recaudar unos 48 millones de euros al año y que implicará subidas en el recibo del agua para el 70% de las familias gallegas pese a mantener el consumo. El Gobierno gallego aprobó este polémico gravamen, apenas un mes después de que el Consello Consultivo advirtiese que iba contra el "ordenamiento jurídico" y tras corregir, según la Consellería de Medio Ambiente, "el 90 por ciento de las observaciones" realizadas por este órgano. La novedad del nuevo canon es que grava los consumos de forma progresiva de manera que pagará más quien gaste más agua. Quedarán exentos, sin embargo, los propietarios de pozos, las traídas particulares, así como unas 7.800 familias en situación de exclusión social. Las familias numerosas tendrán un descuento del 50 por ciento.

Junto al canon de saneamiento se crea otra nueva tasa para costear la depuración de las aguas residuales, el denominado coeficiente de vertido. Este gravamen ya lo venían aplicando los concellos que gestionaban depuradoras, pero no se aplicaba en los municipios donde la Xunta se hacía cargo de las estaciones de depuración de aguas residuales.

Según el Gobierno gallego, "no se crea ningún nuevo impuesto sino que evolucionan los existentes para mejorarlos". El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, explicó ayer que el nuevo canon del agua será "el segundo más barato de España" y destacó que es "más equitativo, más progresivo y más social".

El canon del agua sustituye al canon de saneamiento, que es el que se venía aplicando hasta ahora y que establecía un fijo independientemente del consumo.

El nuevo gravamen establece tres tramos según el tipo de consumo y el número de miembros por familia. En un grupo estarán los hogares con tres personas o menos que tendrán una barrera de consumo al mes de seis metros cúbicos de agua (6.000 litros), en otro tramo estarán los núcleos con cuatro miembros que podrán gastar hasta 8 metros cúbicos y para los que tengan cinco o más integrantes el nivel se situará en 10 metros cúbicos. Si no superan estas barreras de consumo se les cobrará un fijo de 0,50 pero si las sobrepasan pagarán 1,50 euros más un plus que oscilará entre 0,28 euros y 0,45 por metro cúbico de agua.

Feijóo destacó que este nuevo sistema permitirá a un 30 por ciento de los gallegos pagar menos por el agua que consumen. En concreto, serán las personas que vivan solas y las parejas que gasten menos de seis metros cúbicos al mes.

En cuanto a la aplicación del canon a las industrias se le cobrará menos a las empresas que depuren sus aguas antes de verterlas a la red de saneamiento.

La nueva tasa, que nació rodeada de polémica, iba a empezar a aplicarse ya en enero de 2012 pero la Xunta tuvo que aplazarlo debido a su complejo desarrollo reglamentario y al diseño del nuevo sistema de facturación que deberán aplicar las suministradoras. Así, aunque la previsión inicial era recaudar 48 millones al año, al entrar en vigor el nuevo gravamen a mitad de año los ingresos para las arcas autonómicas en 2012 se reducirán a 37 millones de euros, una cifra que, aún así, será superior a lo recaudado con el antiguo canon de saneamiento en 2011 (35 millones de euros). El 100 por cien irá destinado a abastecimiento y saneamiento de aguas.

Además de este gravamen, los municipios cobran también tasas municipales en el recibo del agua. El Parlamento aprobó ayer una iniciativa para pedir a los concellos que no le cobren nada a los vecinos si no alcanzan el mínimo de consumo.

Los controles rebajan un 17% las bajas de funcionarios

El plan para controlar el absentismo laboral en la Xunta ya está dando sus frutos. En el primer trimestre de este año hubo un 17% menos de bajas entre los funcionarios. Según explicó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, esta reducción ha permitido al Gobierno gallego ahorrarse en solo tres meses 3,9 millones de euros.

El jefe del Ejecutivo autonómico agradeció a los empleados públicos que "entendieran el mensaje de comprometerse frente a la crisis". El concreto, el absentismo bajó en el Sergas un 17,5% y en función pública un 17% si se tiene en cuenta el personal ya de baja.Pero además se iniciaron otros 2.163 procedimientos de incapacidad temporal entre enero y marzo, un 23,7% menos que en el mismo periodo de 2011.

Además la Xunta aprobó ayer el proceso para integrar el personal fijo de los chiringuitos que se suprimieron en la Administración autonómica.

Feijóo culpa a la oposición de la asfixia de Foz y Ponteareas

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, responsabilizó a los partidos de la oposición de la delicada situación financiera que atraviesan los concellos de Foz y Ponteareas por "bloquear" la aprobación de sus planes de ajuste económico.

"Los partidos que causaron las deudas no pueden ahora bloquear que se paguen estas deudas", censuró el jefe del Ejecutivo gallego en relación a la falta de acuerdo político en estos dos concellos para sacar adelante el plan de ajuste que exige el Gobierno para ayudar a los concellos a pagar a los proveedores municipales. En los ayuntamientos que se acogieron a este plan, la Administración central empezó ya ayer a hacer efectivo el abono de las facturas pendientes de sus acreedores.

A pesar de la situación de Foz y Ponteareas, Feijóo defendió que en Galicia hay "menos concellos en situación de crisis económica" en comparación con otras autonomías.

Salvamento Marítimo cobrará por los rescates si hubo imprudencia

El servicio de Salvamento Marítimo dependiente de la Xunta empezará a cobrar los gastos de los rescates a las embarcaciones recreativas y deportivas que sufran accidentes por su "imprudencia", por navegar en zonas señaladas como peligrosas, desatender los avisos de alerta meteorológica o cuando se soliciten servicios sin justificación. En estos casos, los gastos deberán ser asumidos por las aseguradoras privadas de los barcos.

En el Consello de la Xunta de ayer se aprobó además una partida de 4,6 millones de euros que irá destinada a realizar cursos de formación para favorecer la inserción laboral de 2.700 desempleados.

En materia de innovación, se dio el visto bueno a 26 proyectos de investigación, en los que participan 106 empresas y que permitirán mobilizar una inversión de 60 millones.

"La situación que ha dejado Ordóñez habla por sí sola"

Núñez Feijóo aseguró que no es necesario hacer balance de la gestión de Miguel Angel Ordóñez al frente del Banco de España porque la situación financiera que deja "habla por sí sola" y deseó "más acierto" a quien lo sustituya, "por el bien de los españoles y de las economías familiares".

Preguntado por las responsabilidades de gestores y supervisores de las entidades, al término del Consello de la Xunta, replicó que él remitió "hace mucho tiempo" una misiva al gobernador del Banco de España pidiendo "que dejase sin efecto" las indemnizaciones millonarias y los planes de pensiones de los directivos de las antiguas cajas gallegas, sobre la que no obtuvo "respuesta".

"En Galicia creo que fuimos responsables", defendió el presidente, para añadir que en este momento "hay que buscar soluciones", aunque sin olvidarse "de las responsabilidades de cada quien". "Hay un tiempo para todo", afirmó antes de enfatizar que, con independencia de que las indemnizaciones estén "blindadas legalmente son ilegítimas desde el punto de vista ético y moral".

Por ello, dichas indemnizaciones deben ser "investigadas y devueltas". "Esa es mi opinión", concluyó.

El plan contra el absentismo reduce un 17% las bajas de funcionarios

El plan para controlar el absentismo laboral en la Xunta ya está dando sus frutos. En el primer trimestre de este año hubo un 17% menos de bajas entre los funcionarios. Según explicó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, esta reducción ha permitido al Gobierno gallego ahorrarse en solo tres meses 3,9 millones de euros.

El jefe del Ejecutivo autonómico agradeció a los empleados públicos que "entendieran el mensaje de comprometerse frente a la crisis". El concreto, el absentismo bajó en el Sergas un 17,5% y en función pública un 17% si se tiene en cuenta el personal ya de baja.Pero además se iniciaron otros 2.163 procedimientos de incapacidad temporal entre enero y marzo, un 23,7% menos que en el mismo periodo de 2011.

Además la Xunta aprobó ayer el proceso para integrar en la Administración autonómica al personal fijo de los chiringuitos que se han ido suprimiendo. El salario de estos empleados públicos se homogeneizará al del resto de la plantilla del Gobierno gallego. La equiparación será progresiva y durará seis años.