Tras recibir el visto bueno del Consejo de Política Fiscal y Financiera la Xunta ejecutará ahora su plan de ajustes para rebajar su déficit del 1,61 por ciento al 1,5 por ciento. Entre las medidas contempladas en este documento, que ayer hizo público el Ministerio de Hacienda, se contempla "la reducción de 250 profesores" interinos por el incremento del horario lectivo de los docentes de Secundaria €obligado por el Real Decreto aprobado por el Gobierno en materia educativa€. A mayores el Ejecutivo de Feijóo ahorrará otros 14 millones en subvenciones, bien eliminando líneas de ayudas "no prioritarias" o reduciendo la cuantía de otras. En todo caso, los recortes no han acabado. La Consellería de Facenda advierte en su documento que en el futuro habrá ajustes adicionales cuando el Estado concrete el reparto de algunos fondos contemplados en los presupuestos y que aún no se han distribuido entre las comunidades autónomas.
Las medidas que aplicará la Xunta no serán en todo caso tan dolorosas como en otras comunidades puesto que Galicia presenta las cuentas más saneadas de España. Cuando se presentaron los primeros datos del déficit regional, la autonomía gallega ocupaba el segundo puesto tras la comunidad de Madrid, pero poco después el Ejecutivo de Esperanza Aguirre advertía de un agujero en sus cuentas de 1.000 millones. El déficit madrileño se duplica así pasando del 1,13 por ciento al 2,2 por ciento de su PIB. Tras esta corrección, Galicia se convierte oficialmente en la región con las cuentas más equilibradas.
Frutos
"Las políticas económicas de la Xunta empiezan a dar sus frutos. Galicia recoge ahora los beneficios y salva el Estado de Bienestar de los recortes", celebró ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. En su opinión, el Consejo de Política Fiscal y Financiera "certificó ayer la solvencia" de la comunidad gallega.
A pesar de que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, aseguró ayer que no premiará a Galicia por estar entre las autonomías más saneadas, Feijóo considera que ya se está beneficiando de un trato de favor del Gobierno y citó un convenio con el Ministerio de Agricultura por el que recibirá 170 millones de euros y otra partida de 90 millones de euros en materia de innovación que el Ejecutivo central solo concedía las autonomías que cumpliesen el déficit.
En todo caso, el desfase de Galicia es del 1,61 por ciento si no se contabilizan las liquidaciones negativas de 2008 y 2009, pero si se incluyen las cantidades que la Xunta tiene que devolver al Estado, su desajuste se eleva hasta el 4,37%. Aunque ambas cifras aparecen recogidas en el plan de reequilibrio presentado por Facenda, el ministerio apunta que el dato oficial es el del 1,61%.
Esto supone que la Xunta tendrá que reducir este año su déficit en una décima, lo que equivale a 69 millones de euros menos. En el plan remitido al Ministerio de Hacienda se detallan todas las medidas de ahorro adoptadas hasta el momento, muchas de ellas incluidas ya en los Presupuestos de 2012, y a mayores se contempla un nuevo recorte de 26 millones de euros.
De esta nueva reducción, la mayor parte afectará a las subvenciones (14 millones). Se salvarán, en todo caso, de este tijeretazo las prestaciones económicas del sistema de dependencia, la Renta de Integración Social o las ayudas al sistema universitario.
Los otro doce millones provendrán de reducir gastos "en indemnizaciones por razón de servicio, publicidad y propaganda, atenciones protocolarias y representativas, reuniones, conferencias, cursos y estudios técnicos".
A estos ahorros, la Consellería de Facenda añade otros que se derivan de los límites impuestos por el Gobierno a la reposición de efectivos en la Administración. Según sus cálculos, este año se jubilarán 358 funcionarios, lo que les permitirá reducir gastos en 12,5 millones. En el ámbito de la sanidad, la justicia y la educación también se retirarán otros 900 trabajadores, aunque en este caso se cubrirán parte de las vacantes para no dejar desatendidos servicios, de manera que el ahorro será menor, de entre 6 y 8 millones de euros.
Y además de recortar gastos, Facenda prevé aumentar sus ingresos, pero no vía impuestos, sino a través de un mayor control del fraude fiscal y de más eficacia en el cobro tributario. Su objetivo es incrementar este año su recaudación en 60 millones de euros. También prevé incrementar en 1,4 millones más de euros sus ingresos por sanciones.
La deuda de Galicia asciende a 7.000 millones, la quinta más alta
La deuda de Galicia ascendió a los 7.009 millones de euros al incrementarse un 0,55 por ciento en el cuarto trimestre de 2011, con lo que supone un 12,3 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB), según los datos publicados ayer por el Banco de España.
La cifra gallega es la quinta mayor por comunidades, situada tan solo por detrás de las de Cataluña (41.778 millones), Comunidad Valenciana (20.762 millones), Madrid (15.447 millones) y Andalucía (14.314 millones).
Las tres primeras (Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid) acumulan el 55,6 por ciento del total del endeudamiento regional. Por su parte, la deuda de la Comunidad gallega supone algo más de un 5 por ciento del total.
En su conjunto, la deuda de las comunidades autónomas aumentó un 17,2 por ciento en 2011, hasta registrar 140.083 millones de euros (el 13,1 por ciento del PIB), la cifra más alta de toda la serie histórica, según datos del Banco de España.
También el dato de Galicia es el mayor de toda la serie histórica, pues desde los 2.140 millones de deuda en 1995 no ha dejado de crecer y, por primera vez, al término de 2011, superó el umbral de los 7.000 millones.
Facenda retrasó hasta 2012 el pago de 213 millones en facturas
A pesar de ser la economía más saneada, la Consellería de Facenda admite en su plan de ajuste que la evolución de su cuenta de acreedores es cada vez más "creciente". De hecho, en 2011 quedaron sin pagar facturas por valor de 213 millones de euros, un gasto que además no aparecía contemplado en los presupuestos de ese año.
"Cuando se cierre el ejercicio pueden quedar obligaciones pendientes de imputar al presupuesto", explican en Facenda.
De hecho, la Xunta tuvo que cerrar ya en octubre su ejercicio fiscal por no disponer de más liquidez. Esta deuda de 213 millones de euros, que se corresponde con gastos de farmacia hospitalaria, ha sido ya saldada, según informan desde el departamento que dirige Elena Muñoz.
