El Gobierno gallego analizó ayer el borrador del decreto que revisará a la baja y limitará las retribuciones a los directivos y miembros de los consejos de administración de los entes públicos de la Administración autonómica. Esta medida estaba obligada por la reciente ley que regula el empleo público y que recorta las prestaciones de 90.000 funcionarios. Con este decreto, que entrará en vigor en mayo, la Xunta pretende ahorrar un millón de euros al año en los sueldos de altos directivos y solo permitirá que el director xeral de la CRTVG y el presidente de Sogama cobren más que el presidente de la Xunta, cuya nómina está fijada en 71.960 euros. Actualmente, al menos 26 altos directivos de los "chiringuitos" perciben unas remuneraciones superiores a las del titular del Ejecutivo autonómico y a todos ellos se le recortará la nómina.

"Tienen que dar ejemplo ante la disminución de capacidad adquisitiva de los empleados públicos", advirtió el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, al término del Consello.

El proyecto de decreto diferencia entre el personal directivo titular de entes públicos y los miembros de los consejos de administración. Para los primeros, las nuevas medidas de austeridad supondrán una rebaja media de sus retribuciones del 9%, aunque la máxima llegará al 21,76%. Y para los segundos, la reducción máxima será del 40%, que sólo se aplicará a los doce miembros del consejo de administración de la CRTVG, ya que son los únicos que ganan más que el presidente de la Xunta, debido a que además del sueldo fijo cobran por asistencia a los consejos y por desplazamiento. Al año perciben más de 75.000 euros.

"Jungla de contratos"

Junto a estos doce consejeros, hay al menos otros catorce directivos que también perciben retribuciones superiores a la del titular del Gobierno gallego, todos ellos repartidos entre la CRTVG, Sogama y el Inega. Pero es posible que incluso haya más, según admiten fuentes de la Xunta, porque en los contratos existe una "jungla de contratos" que hacen difícil controlar hasta dónde llegan los complementos variables y a cuánto ascienden.

Sin embargo, esta situación ya tiene su final a la vista y además con "vocación de permanencia". Se establecerán cinco niveles de retribuciones fijas máximas en función de la responsabilidad, la cualificación técnica de acceso y el volumen de negocio e inversiones y número de empleados de los entes que dirijan.

Los de nivel 1 tendrán un sueldo fijo máximo igual al del presidente gallego y este grado solo se asignará al presidente de Sogama y al director xeral de la CRTVG. Pero podrán cobrar más que el titular de la Xunta porque adicionalmente percibirán los complementos variables, con lo que su remuneración total podrá ser un 14% superior. En todo caso, será menos que lo que cobran ahora (sobre unos 90.000 euros).

Los de nivel 2 tendrá una remuneración equivalente a la de un conselleiro (62.804 euros), los del 3, a de un director xeral (51.11); y los del 4, a la de un subdirector xeral.

Cuando la reducción supere el 10%, este año se aplicará un rebaja en las retribuciones de diez puntos y el resto se trasladará al año 2013, "con el fin de reducir el impacto que tendría hacerlo en un solo ejercicio", precisó Feijóo.

Menos dietas

El mayor recorte se aplicará a los doce consejeros de la CRTVG, para los que se establecerá que percibirán un salario máximo por todos los conceptos equiparable al de un director xeral. Esto supondrá una rebaja aproximada del 40% de sus retribuciones. A mayores, en el resto de las empresas públicas también se reducirán las dietas por asistencia a los consejos de administración en un 15%.

Con estas medidas, según destacó el presidente, se prevé un ahorro anual de un millón de euros, que se suma a los 80 estimados con el resto de las disposiciones aplicadas a los funcionarios, como la supresión del fondo de acción social, la reducción de los días libres, la rebaja en la remuneración por enfermedad o el recorte de la jornada laboral de los interinos y personal temporal.

El borrador del decreto ha sido remitido al Consello Consultivo para su análisis y el objetivo de la Xunta es que entre en vigor en el mes mayo. Feijóo destacó que la rebaja de las retribuciones de los directivos y consejeros responde a una "motivación coyuntural", como es la de afrontar al crisis, y a otra "estructural", puesto que hasta ahora no existía una regulación objetiva, clara y transparente, como advirtió el titular del Gobierno gallego.

El Ejecutivo no contempla la tasa por receta

El titular del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, aseguró ayer con rotundidad que la Xunta no impondrá ninguna tasa por receta farmacéutica y que solo se aplicará esta medida si se decide su implantación en todo España y como una decisión de Estado. Ni siquiera quiso pronunciarse sobre si está a favor o en contra porque, dijo, tal propuesta no existe oficialmente.

Con estas palabras marcaba distancias con la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, quien dijo, a título personal, que no le parecía mal la decisión de Cataluña de cobrar un euro por cada receta farmacéutica.

También sobre sanidad, la Xunta ha actualizado su catálogo priorizado de fármacos para perseguir un ahorro adicional de 20 millones de euros a partir del mes de abril.

Sobre otra de las tasas implantadas por Cataluña, la turística, Feijóo la rechazó por entender que solo perjudicará la actividad económica.

Entre los acuerdos adoptados ayer en el Consello, la Xunta informó de la implantación del programa Abalar para dotar de ordenadores portátiles a los escolares gallegos. El próximo curso se incorporarán al plan 13.000 alumnos más y Feijóo descartó que le puedan afectar los recortes del Gobierno central porque la financiación procede del año anterior.

También informó de que el programa piloto de vacunación frente al pneumococo permitió una bajada de la enfermedad pneumocócica invasora de un 71% con respecto al bienio 2007-2008.

Feijóo justifica el pacto con Brenntag por el accidente que arrasó el Umia ante el "resultado incierto" del juicio

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, justificó ayer por las "incertidumbres del juicio" el acuerdo extrajudicial alcanzado entre la Administración autonómica y la aseguradora de la planta química Brenntag de Caldas que ardió en el año 2006 y contaminó gravemente siete quilómetros del río Umia. Tras este pacto, la empresa abonará a la Xunta 5,5 millones de euros por los gastos que en su día tuvo que afrontar el Gobierno gallego en obras de emergencia para frenar la contaminación y garantizar el suministro de agua potable a la comarca de O Salnés.

Tras el Consello, Feijóo confirmó el acuerdo y explicó que, "ante la inseguridad y la incertidumbre" de una sentencia y de las "causas" del incendio, se consideró "oportuno" asegurar "el cobro inmediato" de esos 5,5 millones de euros. Y es que la Xunta teme que el juicio dé una vuelta tras el informe de la Guardia Civil y del perito de la Administración autonómica que aseguraron en la vista oral que el accidente fue totalmente "fortuito".

El presidente argumentó que estos 5,5 millones "palian los gastos en los que incurrió la Administración" para hacer frente al que se consideró como el mayor vertido contaminante en un río gallego.

La aseguradora de Brenntag informó de que la Xunta ya cobró una indemnización de 5,5 millones de euros en concepto de indemnización pactada. En principio, el Gobierno gallego reclamaba 9,6 millones por los costes de la actuación tras el vertido al río.

En contra del acuerdo extrajudicial se mostró el PSOE, cuya portavoz de Medio Ambiente en el parlamento, Carmen Gallego, calificó el pacto como "impresentable". Gallego asegura que con "este acuerdo de tapadillo", el Gobierno gallego le "perdona" a Brenntag "casi cinco millones de euros a la compañía responsable del vertido al río Umia de productos químicos".

Para la diputada socialista, esto significa reducir "prácticamente a la mitad la indemnización que debería pagar". Añade que ni la Xunta ni Núñez Feijóo "no deben tener muy claro la importancia de mantener el rigor en la aplicación del principio quien contamina paga".