La conselleira de Facenda, Elena Muñoz Fonteriz, ha indicado este miércoles que la Xunta no retirará ninguna de las medidas de recorte propuestas para los empleados públicos y ha destacado que el Gobierno gallego seguirá "con la mano tendida hasta el final" para buscar acuerdos con los sindicatos.

Muñoz ha afirmado, en respuesta a preguntas de los periodistas tras inaugurar unas jornadas sobre auditoría, que cuando se presentaron las medidas a los sindicatos, el pasado viernes, el Gobierno gallego trasladó "desde el primer momento" que estaba "dispuesto a hablar" con estas organizaciones y a "llegar a acuerdos".

En cualquier caso y ante la petición conjunta de retirada hecha por los sindicatos, la titular de Facenda ha negado que se vaya a suprimir alguna de ellas. "Ya dijimos que la voluntad del Gobierno gallego era la negociación pero en todo caso es una decisión del Gobierno, es una decisión meditada", ha defendido. "Por lo tanto, estas medidas se seguirán manteniendo", ha avanzado.

Además, ha señalado que, tras protestar los sindicatos por el plazo fijado para presentar las alegaciones --en un principio tendría que haber acabado este martes--, la Xunta prolongó el periodo hasta el jueves. "Ahora nos encontramos con que anuncian que no van a efectuar ninguna alegación y que van a proponer la retirada del texto, lo que es bastante sorprendente para nosotros", ha destacado.

El Gobierno autonómico, ha insistido la conselleira de Facenda, recalca su "intención de negociar las medidas, que son necesarias". Así, ha destacado que la pretensión de las mismas es "evitar un recorte en los salarios" de los empleados públicos.

"Seguiremos con la mano tendida para negociar hasta el final", ha dicho, en alusión a que los sindicatos han reclamado la retirada del texto y han amenazado con una huelga. "Intentaremos que ellos recapaciten y que se avengan a sentarse con nosotros y hablar de estas medidas y llegar a acuerdos; esa voluntad de diálogo la mantendremos hasta el final", ha asegurado.

Entre las medidas propuestas por la Xunta en el anteproyecto de ley de medidas en el empleo público están una reducción de hasta un tercio de la jornada, con el consiguiente descenso del salario, o que el Gobierno no abone el complemento por incapacidad temporal en los primeros 21 días de baja, salvo en los casos de accidente laboral, enfermedad profesional y maternidad.