El PSOE inicia hoy el Congreso Federal que elegirá entre Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón como nuevo líder del partido para guiarlo tras la etapa del zapaterismo. Dos de los pesos pesados del socialismo gallego eligieron el día de ayer, a 24 horas de iniciarse el cónclave, para mostrar su apoyo sin fisuras al exvicepresidente del Gobierno: Manuel Vázquez, secretario xeral del PSdeG, y Abel Caballero, alcalde de Vigo.

Era un secreto a voces el respaldo de ambos dirigentes a Rubalcaba, si bien han evitado revelarlo durante el proceso de elección de delegados para el congreso, al que acudirán 54 representantes de Galicia.

Vázquez justificó su postura alegando que responde a que "la mayoría" de los militantes del PSdeG apuestan por Rubalcaba, indicó en declaraciones a Europa Press. Asume su posición, si bien defiende haber mantenido su neutralidad "hasta el último minuto".

Sus declaraciones, sin embargo, irritaron a los dirigentes gallegos cercanos a Chacón. "No se puede confundir la opinión personal con el sentir mayoritario", le reprochó el diputado José Manuel Lage, quien recordó que "no se ha hecho una consulta a los delegados ni todos han decidido aún su voto". En su opinión, existe "bastante equilibrio" entre ambas candidaturas. Por su parte, la también diputada Sonia Verdes recordó a Vázquez que los congresillos evidenciaron que existe una "representación plural" en el PSdeG.

Serán 19 los delegados que acudan al congreso representando a la provincia de A Coruña, donde más peso tienen los chaconistas en una lista liderada precisamente por Francisco Caamaño, exministro y mano derecha de ésta. Los siete de Ourense, de una lista avalada por Vázquez, votarán previsiblemente al exvicepresidente del Ejecutivo, mientras que en Lugo ocho podrían apoyar a este y los tres de la candidatura alternativa a la lista promovida por José Blanco podrían decantarse por Chacón.

En Pontevedra la mayoría se posiciona con Rubalcaba. Así lo aseguró ayer Abel Caballero. "Hago explícito mi apoyo personal a la candidatura de Alfredo Pérez Rubalcaba", anunció a la prensa recordando la "buena relación y amistad" que lo une con este dirigente desde hace treinta años. Además, hizo extensible este respaldo a la mayor parte de los 17 delegados que representarán a la provincia de Pontevedra. "La mayor parte de la delegación que encabezo, no sé si todos, pero sí la inmensa mayoría, lleva su apoyo a Rubalcaba", sostuvo sobre un grupo de delegados en los que se mezclan los diez de la lista apoyada por Caballero y el secretario provincial de Pontevedra, Modesto Pose, y los siete de los críticos, en los que también se encuentra el número dos del PSdeG y mano derecha de Manuel Vázquez: Pablo García.

A pesar de coincidir en su voto a favor de que sea el exvicepresidente el que tome las riendas del socialismo, Caballero y Vázquez se enfrentaron en el proceso de elección, evidenciando las tensiones existentes entre ambos y en la familia socialista de la provincia.

Como nota anecdótica, el alcalde de Vigo recordó que "Rubalcaba tomó la decisión de ser candidato a las elecciones generales tras un mitin en Vigo". Por otra parte, recordó que plantearán un mayor peso del poder municipal en las estructuras del partido.

El cónclave socialista concluirá el domingo con la votación de la hoja de ruta política y el nuevo liderazgo del PSOE. Vázquez señaló la participación como "palabra clave", pero rechazó que este cónclave determine el signo del que celebrarán los socialistas gallegos en marzo y en el que él aspira a repetir como secretario xeral y ser elegido cabeza de cartel para las elecciones autonómicas. Se trata, sostiene, de "dos elementos completamente distintos", pero "complementarios". "No tienen por qué ser vinculantes", razona.

Otras fuentes socialistas, sin embargo, coinciden en que el resultado del Congreso Federal marcará la tendencia a seguir en el resto de España. En caso de ganar Chacón, el mensaje de renovación podría aumentar las posibilidades del sector crítico con Vázquez, que busca un rostro con el que competir con él por el liderazgo del partido. Sus posibilidades se reducirían si vence Rubalcaba.