Las excendencias concedidas a profesores por la Xunta se reducen a la mitad para este curso. La razón es que la Consellería de Educación ha restringido los motivos para autorizar estas licencias y también su duración. Hasta ahora el departamento de Jesús Vázquez otorgaba permisos retribuidos a todos aquellos docentes que necesitasen un año sabático para estudiar una carrera, realizar una tesis o preparar un proyecto educativo. Pero a partir de este año solo se concederán excedencias para perfeccionar idiomas o para realizar proyectos vinculados a las nuevas tecnologías y durarán como mucho tres meses.

Estos cambios han permitido reducir a la mitad las excedencias, de manera que Educación tendrá que prescindir de menos profesores durante este curso, en el que precisamente los recortes presupuestarios han obligado a reducir la plantilla en 527 docentes. Además, así disminuye el coste adicional que suponía seguir pagando a estos docentes durante sus excedencias al tiempo que se contrataban sustitutos para cubrir las vacantes que dejaban. De hecho, otras comunidades del PP como Castilla La Mancha ya habían anunciado su intención de suprimir los permisos pagados para profesores.

Según explicó el departamento de Jesús Vázquez, en Galicia no tienen intención de suprimir estas licencias por estudios, si bien han acotado los motivos para solicitar uno de estos permisos.

Con las nuevas limitaciones introducidas por la Xunta solo 69 profesores podrán disfrutar de excedencias pagadas, frente a las 145 autorizadas el pasado curso. A estos hay que sumar las licencias no retribuidas, que pueden ser de hasta doce meses, y para las que no se exige justificar la ausencia por razones de formación o de estudio. Para estas últimas Educación ha concedido 18 permisos frente a los siete del pasado año.

Causas

Estas excedencias a las que pueden acogerse los docentes que no están pagadas no han sufrido cambios con respecto al pasado año. Sin embargo, si se han introducido nuevos criterios en el caso de los permisos de los que disfrutan los profesores mientras siguen percibiendo su salario íntegro.

Solo tres razones justificarán estos permisos. Una de ellas es que el docente quiera perfeccionar un idioma en el extranjero, para lo cual podrá disfrutar de dos meses. También se concederán permisos en una segunda modalidad a los profesores que individualmente quieran dedicar su tiempo –tres meses como máximo– a crear materiales curriculares digitales. Y la tercera opción para solicitar una licencia por estudios responde también al diseño de material escolar adaptado a las nuevas tecnologías pero estará enfocado a grupos de profesores.

Educación justifica este cambio en la necesidad de potenciar el aprendizaje de idiomas y la introducción de nuevas tecnologías en el sistema escolar, dos de las prioridades establecidas precisamente por el conselleiro de Educación durante esta legislatura.

De hecho, los permisos para perfeccionar idiomas están dirigidos a los profesores que tengan un nivel B1 y quieran mejorar su conocimiento de una lengua extranjera para alcanzar la cualificación necesaria para impartir clases en las secciones bilingües o en los centros plurilingües de la comunidad autónoma.

La diferencia con la convocatoria del pasado año es notable puesto que antes el abanico de posibilidades para acogerse a un permiso era mucho más amplio. Cualquier docente que quisiese realizar una tesis, estudiar una licenciatura, una diplomatura o simplemente realizar un proyecto, con temática libre, podía solicitar la excedencia. Estas licencias podían alargarse además durante todo el curso.

En todo caso, lo que no ha variado con respecto al pasado año son los requisitos que deben cumplir los profesores que quieran acogerse a una de estas excedencias pagadas. Se les exigen dos años de antigüedad, no haber sido beneficiario de ninguna otra licencia retribuida por parte de la Consellería de Educación en los últimos tres años y además se valorará sus méritos académicos, los estudios realizados y el proyecto que presente para solicitar la licencia.

Además el departamento de Jesús Vázquez fija los periodos en los que cada profesor podrá coger la excedencia para que la interferencia sobre las clases sea mínima.

Los recortes presupuestarios y la exigencia del Gobierno de cubrir solo el 30 por ciento de las vacantes que se produzcan por jubilación obliga al departamento de Jesús Vázquez a sacar el máximo partido a sus plantillas para atender a un alumnado que además este año se ha incrementado ligeramente.