"No se trata de cuatro horas más o menos a la semana, sino que la Consellería de Educación parece que actúa de mala fe intentando trasladar la idea a la sociedad de que el profesorado de la enseñanza pública no trabaja lo suficiente", expresó ayer en una comisión parlamentaria muy polémica la portavoz de Educación del BNG, Carme Adán.
Educación, PPdeG, PSdeG y BNG cruzaron acusaciones sin ponerse de acuerdo ni en recortes de presupuesto, ni de aulas ni de profesores para este curso. Según las cuentas del diputado socialista, Guillermo Meijón, habrá 729 profesores menos y, para Adán, serán "800 vacantes que se dejan de cubrir", coincidiendo con la ampliación de la carga lectiva de los profesores. Para el director xeral de Centros, quien aseguró que no es posible concretar recortes hasta que se inicie el curso y se cubran todas las plazas necesarias, con la disminución de la carga lectiva aplicada por el bipartito hubo "un incremento de 500 profesores y 60 millones de euros de gasto que se podían haber dedicado a otra cosa". Pinal reprochó que, en la actualidad, "no se puede pretender, como quieren los sindicatos, contratar 500 docentes si no se necesitan".
