Junto con el reordenamiento de sucursales y plantilla, la fusión tecnológica es casi la condición para que el matrimonio de Caixanova y Caixa Galicia funcione. Porque toda operación que se haga en una oficina tiene que pasar por el dispositivo informático. Porque la reducción al máximo posible del coste en las transacciones es fundamental para el ahorro interno en la entidad y la rentabilidad. Tres días después de completarla, el pasado martes, Novacaixagalicia presume de consolidar la unión de la plataforma nueve meses antes de lo inicialmente previsto, la "más rápida" entre todas las cajas inmersas en la reestructuración del sistema financiero y como un arma de lucha de cara a su inmediata transformación en un banco, el 1 de septiembre, al que el sistema "ofrece plenas garantías de eficiencia".

El proceso, según el director general, constata "una vez más la calidad profesional" del proyecto de Novacaixagalicia. "Su enorme flexibilidad para afrontar cada uno de los nuevos escenarios económicos y técnicos que están afectando al sistema financiero español", asegura José Luis Pego, en un comunicado remitido ayer por la entidad.

Con la integración tecnológica, la entidad puede realizar 400 transacciones cada segundo. El coste medio fue de 3 céntimos de euro durante 2010, "uno de los más bajos del sector". Lo que influye directamente en el ahorro, de hasta 18 millones de euros el próximo año y un total de 72 hasta 2015. "El sector está inmerso en una reconversión –afirma Pego– y para Novacaixagalicia lograr ahorros, anticipar sinergias y mejorar su productividad es una prioridad".

En los trabajos de integración informática trabajaron 21 equipos con 550 empleados, tanto internos como de empresas externas. El primer hito fue la unificación en las oficinas de Miami y Portugal, el pasado 15 de julio, en una operatoria "progresiva" para "minimizar al máximo posible el impacto" con los clientes, que emplean ya internet o el móvil para más del 50% de sus operaciones. Durante el fin de semana, la caja admitió complicaciones "puntuales" tanto en banca electrónica como en cajeros. "El éxito de la fusión informática –añade José Manuel Valiño, director de Sistemas y Procesos– no está tanto en la velocidad de la integración como en lo que supone de apoyo a toda la red y en el rendimiento que la caja pueda obtener para mejorar su productividad y la atención a los clientes".

A Novacaixagalicia le gusta presumir de que el DNI de su informática es gallego, con una mayoría de técnicos en la comunidad y los dos centros tecnológicos aquí. El plan estratégico para el área contempla 54 millones de euros de inversión. En I+D, el gasto en 2010 se elevó a 14,2 millones de euros, el 6,1% del desembolso en innovación en el ejercicio de todas las empresas gallegas.