Las energías renovables son el futuro, pero el presente ya no es tan favorable como hace un par de años. El incremento constante de primas al sector se frenará este ejercicio con una caída del 13%. El Gobierno favorecerá a esta clase de energías con 6.172 millones de euros, 940 menos que en 2010, si bien será la eólica una de las principales perjudicadas, con una reducción del 24% hasta los 1.490 millones, 475 menos que el año pasado.

El negocio del viento carga así con la mitad del recorte aprobado por el Ejecutivo de Zapatero, que se planteó como objetivo una reducción del 35% en los incentivos para todas las renovables entre los años 2010 y 2013, en otra medida para reducir el gasto público.

La decisión tiene consecuencias sobre Galicia, que ha sido adelantada por Castilla León y Castilla La Mancha como lugares con más potencia instalada pero aún tiene posibilidades de superarlas cuando entren en funcionamiento los parques adjudicados en el último concurso de la Xunta. La comunidad cuenta con 4.497 megavatios de energía sometida al régimen especial y de ellos 3.290 corresponden al negocio del viento, de los 20.203 instalados a nivel nacional. A ellos se unen otros 492 de la hidráulica primada, aunque la mayor parte de la energía generada a través del agua no percibe primas.

El Gobierno ha decidido recortar el plus que recibían las compañías que aportan energía a la red estatal de carácter renovable, después del boom de los dos últimos años. En 2008, las primas ascendieron a 3.374 millones, mientras que en los dos ejercicios siguientes pasaron a 6.086 y 7.113, respectivamente, según los datos de la Comisión Nacional de la Energía.

El descenso previsto para este año no es uniforme, pues en medio de las estadísticas destaca el incremento de un 118% de la energía solar termoeléctrica, que recibirá más de 403 millones en incentivos este ejercicio, es decir, 218 más que el año pasado.

También experimentan incrementos en sus beneficios la biomasa y la obtenida a partir de residuos, con un aumento del 6,5% y del 13,9% respectivamente. Sin embargo, su tamaño, con 260 y 106 millones, resulta escaso en un paquete en el que destacan como grandes beneficiados la eólica, la cogeneración, con 1.321 millones, y, sobre todo, la solar fotovoltaica, con 2.093 millones.

Esta última utiliza la energía del sol pero genera electricidad a través de una célula fotovoltaica. Su expansión se frenó el año pasado en seco cuando el Gobierno ya anunció rebajas en sus primas. Este año soporta una reducción similar a la eólica, con una caída de casi el 21%. Las empresas que aporten electricidad de este tipo a la red recibirán este año casi 549 millones menos en incentivos que el año pasado, según la Comisión Nacional de la Energía.