Si las condiciones meteorológicas no acompañaron durante el mes pasado a los incendiarios, este mes son las fuerzas de seguridad quienes prometen ponérselo más difícil todavía. Solo entre el fin de semana y el día de ayer, son ya tres las personas detenidas por su relación con focos de fuego: una por la Brilat, en Trives, otra por la Policía autonómica, en Negreira, y, por último, un vecino de Ponte Caldelas capturado por la Guardia Civil. En el caso de este último, H. V. C., de 41 años, detenido ayer por la patrulla del Seprona de Cangas, quedan pocas dudas, ya que la Guardia Civil asegura en un comunicado que fue pillado "in fraganti" "cuando pretendía provocar un incendio". Tampoco en el caso del vecino de Negreira se puede hablar de presunción, ya que él mismo confesó ser autor del foco iniciado tras la quema de matorrales en una finca.

Por lo que respecta al detenido en Ponte Caldelas capturado por el Seprona, no se trata de una casualidad. La Guardia Civil explica que la patrulla estableció un dispositivo de vigilancia en la zona para esclarecer la autoría de los incendios ocurridos durante el año pasado y este mismo en Regodobargo y Chaín, muchos de ellos, señalan, ocurridos entre las 1.00 horas y las 5.00 horas de la madrugada.

Fue a las 2.00 horas cuando los agentes observaron en la carretera que une las localidades de Insua y Chaín un vehículo parado con el motor en marcha, las luces encendidas y la puerta del conductor abierta y vieron cómo una persona estaba "a un metro" del coche "hacia el monte". En ese momento observaron que había "un pequeño foco de fuego". Tan pronto como la patrulla estacionó, explican, esa persona "aprovechó" para apagar el fuego con el pie, subirse a su vehículo "e intentar huir del lugar", pero fue interceptado.

En el caso del detenido por la Policía autonómica en Negreira, que confesó la autoría, el incendio que se le imputa ocurrió el día 28 en Monte da Pena y afectó a una superficie de 3.500 metros cuadrados de monte raso. Según los agentes, la investigación proseguirá "puesto que el modus operandi y las características del incendio coinciden" con dos fuegos que se produjeron en el último año en la zona. Además, recuerdan que el sujeto ya había sido detenido por un suceso similar en 2008.

Mientras los expertos afirman que la tendencia de menos incendios en julio de este año con respecto al pasado siga en agosto, el buen tiempo dejó en Galicia más hectáreas arrasadas. La Consellería de Medio Rural, no obstante, daba ayer por extinguido el incendio registrado en Oleiros (Silleda), tras consumir más de 78 hectáreas, fundamentalmente arbustos, desde su inicio, el sábado. También en este municipio fue controlado ayer el de Siador, tras quemar unas 20 hectáreas, la mitad árboles, y por extinguido el de Refoxos, donde se calcinaron unas cinco, sobre todo de monte raso.

Por otra parte, el sindicato CIG envió ayer un comunicado para denunciar las "condiciones de trabajo" en el Servizo de Prevención e Defensa Contra Incendios Forestais que, a su juicio, van "contra" los trabajadores al "infringir gravemente" la Ley de Prevención de Riesgos" en los equipos de protección individual y en las instalaciones de "muchos de los puestos de vigilancia".