La oleada de incendios con la que arranca el verano ya tiene los primeros presuntos culpables. Han sido detenidos tres hombres como supuestos autores de fuegos en A Cañiza, Vilaba y A Coruña. Entre tanto, los incendios continúan y ayer calcinaron 125 hectáreas.

La Policía Autonómica detuvo a Fernando V. P., de 38 años, vecino de Barreiro-Valeixe (A Cañiza) como presunto autor de un incendio de 21 hectáreas en A Cañiza que además podría ser, los agentes lo están investigando, el origen del fuego más importante de Galicia en lo que va de verano por el número de hectáreas calcinadas –320– en la misma localidad.

El detenido, que prestó declaración ayer en el Juzgado de Instrucción de Ponteareas, negó todos los hechos por lo que quedó en libertad con cargos –deberá personarse cada quince días ante la Justicia–, a pesar de que, según fuentes de la investigación, la Policía maneja claros indicios de que fue el causante de ese incendio, el primero de los tres que se produjeron en la localidad.

Al parecer, el imputado fue detenido tras haber sido visto por los vecinos merodeando el lugar donde podría haberse iniciado el fuego del que se le acusa –y que fue extinguido poco después– a primera hora de la noche del sábado. Las investigaciones se centran en concretar la autoría y las razones, que podrían ser, según fuentes policiales, la enemistad que puede mantener con algunos vecinos.

En los últimos días, los equipos de investigación de incendios forestales de la Xunta trabajan en determinar el origen exacto del fuego más importante en A Cañiza, iniciado en la madrugada del domingo, que generó gran alarma por estar próximo a casas, lo que provocó algún desalojo e incluso la pérdida de energía eléctrica al quemarse varias líneas. Una de las líneas de investigación baraja que el gran incendio sea consecuencia del que causó el presunto culpalbe, en cuyo caso el detenido sería imputado también por éste.

No fue el único detenido en la jornada de ayer. La Policía Autonómica arrestó a un ciudadano de Vilalba (Lugo) como presunto autor de un incendio el domingo en Areosa, que afectó a 1.500 metros cuadrados, la misma superficie que se calcinó en San Xulián de Laíño (A Coruña), lo que motivó la detención, según informa la Xunta, de otro ciudadano.

Mientras los agentes arrestaban a sospechosos, los incendios siguieron calcinando ayer Galicia. A última hora la Xunta informaba de que el fuego registrado en San Xurxo de Ribadetea (Ponteareas) seguía controlado desde las doce de la mañana, después de doce horas de lucha y de haber calcinado 25 hectáreas. Otro que también se pudo controlar, gracias a los bomberos de Pontevedra y efectivos de Protección Civil y del servicio de extinción de la Xunta, fue un incendio que se declaró a mediodía en las cercanías del colegio público de Marcón y de una vivienda.

No hubo la misma suerte con los cuatro que quedaban activos a última hora en Silleda (Pontevedra), donde la superficie quemada superaba las 20 hectáreas, y en los municipios coruñeses de Cabana de Bergantiños, Ponteceso e A Baña, donde se calcinaron, respectivamente, 35, 25 y 20 hectáreas. Es decir, en total se quemaron en la comunidad, al menos, 125 hectáreas.

Además, los fuegos acechan espacios de alto valor ecológico y turístico, como ocurre en O Salnés y Ullán. El entorno natural de San Vicente de O Grove –donde Area Grande y Piñeirón son espacios protegidos– volvió a ser escenario de nuevos incendios –y van cuatro en un mes–, lo que hace sospechar a los vecinos que "alguien quiere quemar este espacio a toda costa". Y no solo O Grove.

En O Terrón (Vilanova), una zona igual que San Vicente rodeada de playa y monte y dotado con establecimientos turísticos, también se registraba ayer otro fuego.