A finales de 2010 el PP de Cotobade llevaba cuatro años en la oposición y sin un candidato que hiciera frente al socialista Manoel Loureiro, que ostentaba el mando desde hacía ocho años. Bajo la protección de la dirección provincial del partido, un estudiante de cuarto de Derecho, Jorge Cubela, accedió a la presidencia del PP de Cotobade a finales de año y en unos meses formó una candidatura que le ha devuelto al PP la alcaldía con mayoría absoluta. Unos resultados que lo convierten en el que será el alcalde más joven de España.

–¿Imaginaba esos resultados?

–Cuando me propusieron ser candidato acepté porque las previsiones que tenía es que había grandes posibilidades de ganar. Trabajamos para ello, elaboré una candidatura para ganar y gobernar. Al final, hemos contado con el 49,23% de los votos con una participación del 80,45%, algo que nos dota de una gran legitimidad para llevar a cabo nuestro proyecto.

–¿Y cómo lleva ser el alcalde más joven?

–Es anecdótico, le tiene que tocar a alguien. Me alegro porque se está dando a conocer Cotobade en España. Me dará a conocer un poco más entre la gente, también entre la de mi partido, pero a mí lo que me enorgullece es ser el alcalde de mi pueblo y que ganase el PP.

–En unos días habrá que ponerse en mono de trabajo...

–Efectivamente. Tenemos muchas ganas de coger las riendas del ayuntamiento y espero la colaboración del Partido Socialista, escucharemos todas sus propuestas.

–¿Compaginará sus estudios de Derecho con la alcaldía?

–El Derecho es algo que me va a ayudar bastante en mi cometido. Estoy en cuarto y espero terminar el año que viene. Intentaré compatibilizar ambas cosas. Sé que a partir de ahora voy a tener muy poca vida social, pero estoy muy contento, me va a hacer muy feliz este proyecto. También tendrá sus momentos difíciles, como todo. Ahora cuento con la confianza mayoritaria de Cotobade, pero dentro de cuatro años si no lo hago bien elegirán a otro. Espero impulsar un proyecto en el que se note el cambio.

–A finales de 2010, cuando le nombraron presidente del PP en Cotobade, ¿se esperaba que en unos meses fuera alcalde?

–Sí. Cuando la gestora me propuso como presidente del partido empecé a formar un equipo y el objetivo era la mayoría absoluta. Sería un irresponsable si dijera que me presentaba para ser la segunda o tercera fuerza. El PP es un partido de gobierno en Cotobade y en ese sentido queríamos volver a ser el partido de todos los vecinos de Cotobade. Lo hemos logrado y ahora queda trabajar.

–Pero hacía ocho años que gobernaba el PSOE...

–Sí, y eso era un reto que me ayudaba todos los días a levantarme con más ganas de trabajar y de patear todo el ayuntamiento. Hemos dado un vuelco electoral, la participación ha subido 13 puntos..., había ganas de un cambio y me alegro de que en mi pueblo la gente no se conforme y de que apueste por una candidatura joven, con una media de 38 años, y con el respaldo de un partido que gobierna en la Diputación y en la Xunta.

–Su juventud se usó como arma de campaña...

–Les dio mucha salsa en campaña. Se cebaron conmigo por la edad y se limitaron a hacer campaña con eso. Yo me limité a hacer propuestas y a hablar con los vecinos. Al final las urnas hablaron.

–Alfonso Rueda dijo que si usted era "alcalde a los 22 años, a los 30 sería presidente". ¿Cómo lo ve?

–Aún no he tomado posesión de alcalde como para verme ya fuera de Cotobade. La gente que llega a la política y con prisas suele acabar estrellándose. Hay que medir los tiempos. En estos momentos solo aspiro a ser alcalde de mi pueblo, a escuchar a los vecinos y a seguir gozando de su confianza. Ni me planteo una carrera política ni nada, solo cumplir un programa y un proyecto político. Trabajar por mi pueblo que es lo que me hace feliz ahora mismo.

–De tal palo, tal astilla. Su padre fue concejal y teniente de alcalde con la UCD...

–Sí, además me llamo Jorge Cubela como él. Siempre me gustó ir con mi padre a todas partes, hacemos muchas cosas juntos y a los dos nos gusta la política. Debatimos mucho y a veces también tenemos puntos de desacuerdo. Me gusta la política y me gusta Cotobade y para alguien a quien le gusta la política como a mí y como a él, no creo que haya algo más grande que ser alcalde de tu pueblo. Creo que, en ese sentido, mi padre también se siente realizado con todo esto.

–¿Y qué le dijo cuando se supo que ya era alcalde?

–Yo estaba en la sede del partido y él en el recuento en la mesa de nuestra parroquia, que fue la última en conocerse el escrutinio. Cuando llegó al "cuartel general" simplemente nos dimos un abrazo.

–Antes hablaba del apoyo que recibe del presidente provincial, ¿qué le parece que le califiquen como el "delfín" de Rafael Louzán?

–Louzán tiene 62 "delfines" en la provincia que son los 62 candidatos que tiene el partido. Yo soy uno de ellos, porque soy candidato y logré la Alcaldía, pero no hay que olvidar al resto como a María Ramallo que arrasó en Marín, o los candidatos que recuperaron feudos "históricos" para el socialismo como Moraña, Vilagarcía o en A Illa que nos quedamos a un puñado de votos..., el mérito en Cotobade no es mío, sino de una candidatura que trabajó a "cañón", de 21 personas y decenas y decenas de vecinos que nos apoyaron y trabajaron desde colocando sillas a llevando agua para los mítines.

–¿Cómo se metió en política?

–Me gusta mucho la historia y leer. A los doce o trece años ya me leía el periódico todos los días y estaba informado y me interesaba todo lo que sucedía. A los 16 me afilié a Novas Xeracións y empecé a implicarme y a conocer la organización.