Es el único escenario provincial en el que hay una alternativa a los populares. La suma de los diputados de PSdeG y BNG en Lugo es suficiente como para entablar una legislatura más juntos en la diputación. Pese al deterioro de los resultados. El PPdeG consiguió elevar de 11 a 12 el número de representantes en el organismo provincial lugués, a costa del concejal que pierden los nacionalistas, que pasan de tres a dos. Los socialistas aguantaron el envite con once.

Con casi el 47% de los votos en Lugo, el PPdeG recupera parte del terreno perdido en las últimas elecciones en la provincia. Son 5.300 votos más que los recibidos en 2007, cuando obtuvo 344 concejales y 11 diputados. Los mismos que el PSdeG logró en un cambio de poderes sin precedentes en la historia de la diputación luguesa. José Ramón Gómez Besteiro, mano derecha del alcalde López Orozco hasta que asumió en los pasados comicios la presidencia del organismo provincial, seguirá con toda probabilidad al frente de la gestión. Queda por saber quién será el vicepresidente, a la espera de que lo que ocurra con el actual, Antón Bao, cabeza de lista al concello de la capital, y que puede convertirse en el apoyo del PSdeG para retener el mando en el ayuntamiento.

Hasta 13.000 votos pierden los socialistas en la provincia de Lugo con respecto a 2007. Por encima de los 7.000 en el caso del Bloque.