La clave está en un concejal. A una semana de celebrarse los comicios municipales, la distancia que separaría a Corina Porro y a Abel Caballero de la Alcaldía de Vigo sería la misma: un acta. La encuesta de Ipsos realizada para FARO DE VIGO dibuja un escenario de igualdad en el que ambos candidatos mantienen abiertas sus opciones de lograr el bastón municipal el próximo 22 de mayo. El desenlace dependería de hacia dónde se inclinase el concejal que podría perder el Bloque Nacionalista Galego. Las fuerzas, según el trabajo demoscópico, se distribuirían así: el Partido Popular, que pierde algunos votos, oscilaría entre los 13 concejales que tiene ahora y los 14, que le otorgarían la mayoría absoluta; el PSOE, que ganaría apoyos ciudadanos, se movería entre los nueve ediles actuales y los diez; y el BNG de Santiago Domínguez vería mermada su representación en un acta y se quedaría en cuatro. En la recta final de campaña, los vigueses se debaten entre revalidar su confianza en Abel Caballero en alianza con el BNG de Santiago Domínguez o entregársela al Partido Popular de Corina Porro.

Con una participación estimada en el 63 por ciento (dos puntos más que en 2007 y en los mismos niveles que en 2003), el PP atraería el 43,7 por ciento de los votos, una cota ligeramente inferior (0,4 puntos) a la cosechada en las últimas elecciones locales, aunque le reporte idéntico número de ediles. El PSOE, sin embargo, ve cómo se incrementa el número de electores que apoyarán su lista, al pasar de un 29,4 al 31,7%, el mejor resultado para los socialistas desde hace veinte años, cuando en 1991 la candidatura encabezada por Manoel Soto lograba un 37,7% y once ediles. La lista nacionalista, sin embargo, empeora sus números al atraer un 15,4% de sufragios, 3,2 puntos menos que en 2007 y muy por debajo de la cosecha de 1999 y 2003.

Pero la incertidumbre sobre el resultado final el próximo domingo se acrecienta al observar otros parámetros que podrían arrojar cierta luz. Así, la igualdad entre Caballero y Porro se extiende a elementos tan variopintos como la similar valoración que hacen de ellos los ciudadanos en su calidad de líderes políticos; o a la calificación, en general positiva, que les dan a sus gestiones al frente del Concello y de la Autoridad Portuaria, respectivamente. También en ambos casos los vigueses aprecian a Caballero y a Porro muy por encima de lo que valoran a sus líderes nacionales, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy. En el caso del candidato socialista no parece que la gestión del Gobierno central sobre Vigo le vaya a beneficiar. De igual modo, la cabeza de lista popular tampoco debería contar con una posible influencia positiva de la labor de la Xunta de Núñez Feijóo ni de la Diputación en Vigo. En resumen, Caballero y Porro se situarían por encima de sus respectivas marcas políticas, que no le aportarían un plus. Según el trabajo, estos elementos, entre otros muchos que recoge la encuesta, podrían ajustar todavía más el apretado resultado.

La encuesta de IPSOS descarta que otras formaciones políticas puedan entrar en la corporación municipal. La lista de Esquerda Unida, que sería la que tendría más opciones, se quedaría en un 3,4% de votos, un resultado que la mantiene todavía alejada del mínimo del 5 por ciento que exige la ley para obtener un representante. UPyD, el partido que lidera en España Rosa Díez en el ámbito nacional, tampoco tendría opciones.

El número de personas que todavía no han tomado una decisión sobre a quién votarán en la cita del 22 de mayo se sitúa en el 9,1 por ciento, un porcentaje similar al registrado en 2007.