Ante estas medidas propuestas por el Gobierno central para reducir el déficit, la Xunta solo puede cumplir las disposiciones de Madrid, porque tanto la política salarial como la de reposición de vacantes son competencia exclusiva del Estado. En todo caso, la Consellería de Facenda admitió ayer que nada podía decir sobre la medida de "moderación salarial" recogida en el Programa de Estabilidad. Lo que sí garantizó el departamento que dirige Marta Fernández Currás es que la Xunta no tiene previsto reducir los complementos que le corresponden en la nómina de los empleados públicos.

Los sindicatos tampoco tenían ayer constancia de cuáles son las previsiones del Gobierno central sobre la política de remuneraciones. "No las conocemos", reconoció la responsable de Administración de la CIG, María do Carme López. No obstante, admite que no le sorprendería, debido al amplio programa de reformas que tiene por delante el Ejecutivo de Zapatero para contener del déficit público.

Las centrales sindicales recuerdan que a los funcionarios se les recortó el sueldo en 2010, aunque durante seis meses, y que este año los efectos serán mayores porque se mantendrá la rebaja del 5% durante todo el año. "Si en 2010 ya perdimos poder adquisitivo, este año será más", asegura María do Carme López.

La verdadera dimensión del ajuste de plantilla y de salarios se plasmará cuando el Gobierno elabore sus presupuestos para 2012, ya que será ahí donde deba recoger, para que sean efectivas, todas las medidas que aparecen anunciadas en el Programa de Estabilidad.