La Consellería de Traballo ha decidido prorrogar las ayudas a los parados gallegos que se inscriban en cursos de formación. La prestación será de 400 euros mensuales, pero no será para todos, sino para aquellos cuyos ingresos no superen los 399 euros al mes y además dispongan de un itinerario personalizado de inserción, es decir, que siga la rama formativa acordada por su monitor de acuerdo con sus competencias laborales y las ofertas del mercado. La Xunta calcula que serán unos 6.000 los desempleados que tengan derecho a percibir esta ayuda, que también la concede la Junta de Castilla y León.

Esta prestación, que tendrá un duración igual a la del curso –entre tres y nueve meses–, repite el esquema ya aplicado el pasado año, que benefició a 4.500 parados. Pero en 2011, debido al empeoramiento de la crisis y al descenso de los ingresos familiares, la Xunta calcula que serán unos 6.000 los desempleados que cobren los 400 euros.

Pero habrá otras prestaciones económicas para quienes se apunten a los cursos de formación. Traballo concederá hasta 140 euros al mes para los que se desplacen en transporte público a los centros formativos, que solo en el caso de distancias superiores a los 50 kilómetros y por incompatibilidad con el transporte público se podrá sustituir por una subvención de diez céntimos por kilómetro recorrido en vehículo particular.

En el programa de este año, la Xunta ha organizado 1.500 actividades formativas con 23.000 plazas disponibles, que serán financiadas con una partida de 53 millones de euros, una cifra superior en un 5% a la habilitada el pasado año.

La conselleira de Traballo, Beatriz Mato, defendió que las prestaciones hay que entenderlas como una "política activa de empleo y no una línea de ayuda pasiva", ya que se da más atención a las personas con "mayores carencias". Mato destacó que los cursos de este año están más ajustados a la demanda real del mercado de empleo y a la concesión de certificados profesionales válidos en toda España.