El nuevo Plan de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos que ha aprobado hoy el Consello de la Xunta tiene entre sus objetivos reducir un 10 por ciento, en diez años, los 2,1 millones de toneladas que actualmente se generan en Galicia.

El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, indicó, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Ejecutivo, que uno de los principales objetivos del nuevo plan es concienciar a los ciudadanos de la importancia de reducir y reciclar los residuos sólidos urbanos (RSU).

El nuevo plan sustituye al vigente desde el año 1998 y su constitución y aplicación supondrá una inversión total de 500 millones de euros, dijo Feijóo.

Entre los retos que formula el plan figura estabilizar la producción de residuos en el período 2014-2017 y lograr que en 2020 la población gallega produzca un 10% menos de RSU respecto de los 1,2 millones de toneladas que se generan en la actualidad (1,216 kilos por habitante/día).

Además, se pretende disminuir progresivamente los residuos que van a parar a vertederos hasta lograr que en 2015 el cien por cien de la basura que se produce en Galicia se trate correctamente.

Ello supondrá que mientras en la actualidad se lleva a vertederos controlados el 53% de los RSU generados, el objetivo es reducir el porcentaje hasta el 24%, depositando sólo aquellos residuos que no pueden ser reciclados.

El tercer gran eje del plan será el incremento de la reutilización y el reciclaje de los residuos hasta un 30% del total de los residuos sólidos generados, frente al 10% actual.

Este objetivo se logrará, según lo previsto en el plan, mediante la valorización material del 25% de la materia orgánica (fundamentalmente a través del compostaje), el 60% del vidrio, el 50% del papel y cartón, y el 50% de los envases ligeros.

En la actualidad SOGAMA lleva a vertedero un 51% de los residuos que no es capaz de tratar y Nostián el 66%, "una situación insostenible ambientalmente", destaca el Gobierno gallego.

La inversión en la planificación de la red de infraestructuras previstas en el plan asciende a 417,6 millones de euros, de los que 358,6 se destinarán a nuevas plantas de tratamiento (compostaje y nueva planta del sur) y los 59 millones restantes a la mejora de la capacidad de las plantas existentes.

De esta cantidad, el complejo de tratamiento de residuos urbanos del sur supondrá 244,8 millones de euros, pues contará con una planta de valorización energética y una planta de compostaje, además de una planta de selección de envases y otra de selección mecánica.

Galicia dispondrá de ocho nuevas plantas de compostaje, en las que se invertirán 81,5 millones de euros. Además, de la planta de compostaje en el complejo del sur, que implicará 22 millones de euros de inversión, se construirá otra en SOGAMA, por un importe de 13 millones de euros, y otras seis en localizaciones aún por determinar que suman un presupuesto de 46,5 millones de euros. A estas se sumarán 11,4 millones en plantas locales y pequeñas.

El conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, explicó que el Plan de Residuos recibió 68 alegaciones relativas a diversas cuestiones, la mayor parte relacionadas con la valorización energética, modelos de gestión, financiación, relaciones entre administraciones implicadas y alguna puntualización respecto de los principios y objetivos del plan.

De las alegaciones recibidas, destacan aspectos como que se aplique el principio de "quien contamina paga y además repara"; aclarar la definición de materia orgánica y la gestión de los alimentos envasados y caducados; referencias a la integración paisajística de las infraestructuras, o aclarar la gestión de los residuos de obras menores.