La Consellería de Sanidade calculaba que el catálogo gallego de fármacos, por el cual el Sergas solo financiará los medicamentos de menor precio, en su mayoría genéricos y no de marca, podría ahorrar 112 millones de euros al año. Aunque para 2011, en los presupuestos de la Xunta se rebaja el ahorro a 71 millones, sigue siendo una cuantía nada desdeñable y el BNG propone que se reinvierta en la sanidad pública, y en concreto, "en la mejora de la capacidad resolutiva de Atención Primaria".

Fue la condición que pusieron los nacionalistas gallegos para respaldar este proyecto, que ya ha sido cuestionado por el PSOE, el Ministerio de Sanidad y Farmaindustria. Colectivos médicos, por el contrario, han apoyado la iniciativa del Gobierno de Núñez Feijóo.

La demanda de la formación frentista ha tenido éxito. Los populares la aceptan, tanto que la han hecho suya, y han presentado en este sentido una enmienda a la proposición de ley que presentaron en verano. El BNG también ha formulado una enmienda al respecto. Y exigen que la Consellería de Sanidade acuda con una periodicidad semestral al Parlamento a informar de cuánto se ha ahorrado y cómo se ha reinvertido en la sanidad pública gallega.

Por su parte, los socialistas insisten en que la iniciativa de Pilar Farjas invade competencias del Gobierno español y que además supone un agravio para los ciudadanos gallegos que no tendrán derecho a fármacos a los que sí accederán a través del sistema público vecinos de otras comunidades. Por ello, las enmiendas del PSdeG pasan por proponer como alternativa al catálogo "el impulso a la prescripción por principio activo".Una iniciativa en este sentido ya fue aprobada por el Parlamento autonómico, y consiste en que los médicos no prescriban marcas, sino principios activos para impulsar el consumo de genéricos.