Con la misma filosofía con la que confeccionaron la cúpula directiva que asumirá las decisiones del día a día de la entidad única tras su fusión en apenas dos meses, Caixanova y Caixa Galicia cierran el resto de la estructura organizativa. Lo que en las últimas semanas se venía llamando la segunda fila. Los cargos intermedios, en definitiva, que responderán directamente ante el director general, José Luis Pego, su adjunto, Javier García de Paredes, o alguna de las diez áreas estratégicas en las que se reparte el negocio. Las entidades insisten en el "equilibrio" y la "eficiencia" de la designación en los 58 cargos que ya han sido comunicados a toda la plantilla y que, entre otros, elevan al actual encargado de la Obra Social de la caja viguesa, Guillermo Brea, como responsable también de este departamento tras la integración.
Precisamente los integrantes del comité de dirección capitaneados por Pego están detrás del análisis de cada uno de los nombramientos junto con los asesores de Russell&Reynolds, la firma de cazatalentos que lleva trabajando con las cajas desde que decidieron unirse para elegir al mejor candidato para cada uno de los puestos y, de paso, cumplir con la exigencia del Banco de España para este tipo de procesos. El supervisor obliga a echar mano de una empresa especializada para garantizar la profesionalidad del cuadro de mando. Caixanova y Caixa Galicia presentan la nómina como un paso más en el asentamiento de "las bases para la construcción de un proyecto sólido y de futuro".
El hasta ahora auditor general de Caixa Galicia asume la misma tarea en la entidad fusionada. Albino Espinosa es una de las novedades en el organigrama, junto con el que era su homólogo en Caixa Galicia, Antonio Carrera, encargado a partir de diciembre de la secretaría de los dos copresidentes, con Julio Fernández Gayoso en el primer turno.
Las dos áreas más potentes del negocio y la actividad financiera, bajo la tutela de caja viguesa, están completadas. Con Juan Díaz Arnau, futuro director comercial, trabajará de adjunto Julio Rivero, responsable de la red de Caixa Galicia para Galicia, Asturias y León. La estrategia de marketing y desarrollo de negocio estará en manos de José Luis Abelleira, que ya desempeñaba esta misma ocupación en Caixanova. Junto a ellos, Dolores Estrada llevará las tareas comerciales en el norte de Galicia y Asturias; Gabriel González, en el sur de la comunidad y León. Eduardo Vioque se encargará del negocio minorista en España; Santiago Novoa, del de empresas; Roberto Franci, del mercado internacional; y Carlos Corral, del de América. Todos ellos, la mitad de cada caja, asumen actualmente las mismas labores en su día a día.
La otra pata fuerte, en la dirección general adjunta de Finanzas y Mercados, que gestionará Victoria Vázquez, de Caixanova. De ella dependerán Marcos Oubiña, en quien se delegan los asuntos de financiación en mercados mayoristas; Ignacio Navas, con Tesorería y Mercado de Capitales; Juan Gutiérrez, que llevará las participaciones empresariales estratégicas; y José Luis Méndez Pascual –hijo del ya ex director general de Caixa Galicia0 y responsable hasta ahora de toda la cartera industrial de la entidad coruñesa–, sobre las participaciones corporativas en empresas. Fuentes cercanas a las cajas aseguran que es probable que también continúe el otro de los hijos de Méndez.
Bajo la batuta de García de Paredes estarán siete departamentos. Una secretaría general, que ocupará Francisco Serna; el de Personas, con Rubén Martínez; la política de Relaciones Laborales, con Miguel Prado; las tareas de Comunicación, con Manuel Vázquez Sola; el de Relaciones Institucionales, con Juan Carlos Fontán; la Asesoría Jurídica, con José Enrique Álvarez-Naveiro; y Cumplimiento Normativo, con Mikel Echarren.
El responsable de la obra social conjunta, Guillermo Brea, estará ligado a la dirección general adjunta de Óscar Rodríguez Estrada, también de Caixanova, y que representa uno de los pivotes sobre los que se asienta la oficina que irá limando todos los aspectos prácticos de la fusión en la actividad habitual. En el comité está también integrado Ramón Seoane, de Caixa Galicia, pendiente del control del gasto, intervención y servicio de estudios.
"Trabajo intenso"
Pego y Paredes han trasladado en las últimas horas la felicitación a los directivos elegidos con la petición de "trabajo y colaboración" ante el "proyecto ilusionante" que tienen por delante. "El trabajo será muy intenso, pero seguro que de él surgirá una caja de ahorros en Galicia que será fruto del empeño puesto por cada uno de nosotros desde nuestras respectivas áreas de responsabilidad", aseguran.
El próximo día 18 las Asambleas de Caixanova y Caixa Galicia tienen que aprobar la fusión. El calendario del proceso marca el 1 de diciembre como fecha para el comienzo de las operaciones conjuntas. Hasta entonces, según las entidades, quedan todavía por encajar otras líneas de la estructura organizativa en las que ya no participarán los asesores externos.
