Captar "un mayor volumen de fondos" de la UE. Éste es el principal argumento que ayer manejó el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para explicar el nacimiento de la macrorregión Regiones del Sudoeste Europeo, que integra a Galicia, Castilla y León y Norte de Portugal, y que en su opinión "contribuirá a situar al córner de Europa en el centro de la Unión".

También puso la venda antes de la herida, quizás anticipando las críticas de la oposición, y aseveró que "esta nueva fase en la cooperación no invalida lo vigente, sino que complementa lo que ya construimos", en alusión a la eurorregión Galicia-Norte de Portugal, que lleva años funcionando y captando subvenciones comunitarias.

Feijóo hizo estas declaraciones desde Valladolid, donde firmó el protocolo de creación de la macrorregión junto al presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, y el presidente de la Comisión de Coordinación y Desarrollo de la Región Norte de Portugal, Carlos Lage.

El presidente gallego también aclaró que la macrorregión no es un chiringuito más de las administraciones. "No implica constituir un nuevo nivel administrativo ni crear ningún organismo público adicional", aseveró Feijóo, quien no olvida "el compromiso de austeridad" que asumió al llegar a la Xunta, en plena crisis económica.

Pero, ¿qué es la macorregión? En palabras del titular del Gobierno gallego, "un instrumento innovador que facilita la puesta en común de los medios y recursos de Galicia, Castilla y León y Norte de Portugal, a fin de diseñar propuestas conjuntas ante problemas comunes".

La macrorregión es una nueva fórmula impulsada desde la UE en los últimos tiempos, donde no se exige cooperación transfronteriza, como en las eurorregiones, sino "colaboración interregional" entre espacios que "comparten intereses comunes".

Desde la Xunta sostienen que la macrorregión es el programa de cooperación de moda en la UE y hay que apostar por él para garantizar subvenciones comunitarias a partir de 2014, cuando entrará en vigor el nuevo marco presupuestario de la Unión.

La macorregión en la que participa Galicia se iba a llamar en principio Regiones del Noroeste Ibérico, pero se le cambió el nombre por Regiones del Sudoeste Europeo, para abrir la puerta a la incorporación de regiones de otros países comunitarios.

¿Y cuáles son los intereses comunes de Galicia, Norte de Portugal y Castilla y León, un espacio que aglutina a nueve millones de habitanes y cuya economía equivale al 12 por ciento del PIB de la Península? Exactamente seis: Economía e Industria, Educación, Universidades e Investigación, Laboral, Medio Ambiente, Cultura y Turismo, y Transportes y Logística.

Y por ello, en estos seis ámbitos impulsarán proyectos comunes que deben atraer financiación europea. Seis grupos de trabajo con técnicos de las dos comunidades españolas y la región lusa deben dar forma a estos proyectos y "llenar de realidad" la macrorregión, que es la primera que se constituye en la Península Ibérica y la tercera en el ámbito europeo.

Un ejemplo concreto: tejer una alianza en el sector del automóvil, pues en las tres regiones esta industria es pujante.

Feijóo y Juan Vicente Herrera subrayaban ayer los puntos de acuerdo, pero los periodistas evidenciaron la existencia también de divergencias, al preguntarles por los intereses opuestos que defienden en el sector del carbón.