El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, presentó hoy en su residencia oficial de Montepío la fusión "paritaria y equilibrada" de las cajas de ahorro gallegas en un nueva entidad que tendrá su sede institucional y operativa en Vigo, la social en A Coruña; e igual presencia de Caixa Galicia y Caixanova en los órganos de dirección.

Núñez Feijóo, acompañado por los presidentes de Caixanova y Caixa Galicia, Julio Fernández Gayoso y Mauro Varela, respectivamente, y sus directores generales, José Luis Pego y José Luis Méndez, así como por la conselleira de Hacienda, Marta Fernández Currás, explicó en una declaración institucional el acuerdo aprobado esta mañana por los consejos de administración de ambas cajas.

Así, informó, la nueva caja tendrá co-sedes en A Coruña (social y fiscal), y Vigo (institucional y de dirección de negocio), y se ha establecido un período transitorio de tres años, que se repartirán los dos copresidentes para ejercer las funciones de presidente, en un orden que acordarán ambas cajas.

El acuerdo alcanzado establece que todas las comisiones que se constituyan en el seno del consejo de administración estarán formadas por el mismo número de consejeros procedentes de ambas, lo que ocurrirá también con el numero de comisionados de la comisión de control, de los consejeros de la asamblea general y de los vocales del consejo de administración.

También se acordará un equipo de dirección, con un director general y un director general adjunto ejecutivo y único, provenientes de Caixanova y Caixa Galicia, respectivamente.

El presidente del Gobierno gallego señaló que, asimismo, se constituirán dos consejos territoriales, uno en A Coruña y otro en Vigo, con los vocales de los consejos de administración que no formen parte del de la caja resultante.

Núñez Feijóo consideró que la unión de ambas cajas "tiene un significado que va más allá de las consecuencias estrictamente financieras" y "supone un ejemplo de cómo debe combatirse la crisis que nos desasosiega, no con un pesimismo paralizante, ni con un optimismo falaz, sino con un realismo constructivo".

Tras calificar la inspiración de este acuerdo de "galleguismo de cooperación", el jefe del Ejecutivo autónomo opinó que "la crisis tendrá peores consecuencias para aquellas Comunidades en las que fructifique la semilla de la insolidaridad".

Para Núñez Feijóo, "por fortuna, los gallegos estamos cultivando un sentimiento de unidad que hace posible este entendimiento" y "cada uno cumplió con su deber y el resultado es un acuerdo que disipe nuestros problemas y que, sobre todo, ayudará a resolverlos antes que más tarde".

El presidente gallego estimó también que "no hay reproches que hacer. La unión se hace para unir más a los gallegos y, por lo tanto es preciso invitar a los reticentes y a los que aún tienen recelos o dudas a que colaboren lealmente en la tarea de crear una gran institución de Galicia y por Galicia".

También consideró que "los miembros de ambas cajas tenían argumentos razonados para reclamar más, pero este acuerdo generoso, este acuerdo equilibrado, este acuerdo paritario es fruto de sus renuncias y de que ambas cajas entendieron que el argumento que mas debía pesar es el argumento del interés general".

Concluyó que este "interés general y común era que Galicia permaneciera en el mapa financiero español" y "Galicia permanecerá en el mapa financiero español con una caja de ahorros fruto de un acuerdo de las cajas por una fusión -insistió- equilibrada y una fusión paritaria, en órganos de representación y en órganos de gobierno y también en co-sedes, de Galicia y para Galicia".

El presidente de la Xunta concluyó su declaración señalando que había informado de este acuerdo a los líderes de la oposición, Pachi Vazquez (PSdeG) y Guillerme Vázquez (BNG), quienes le transmitieron la felicitación a ambas cajas.