La reunión convocada por el presidente de la Xunta con los líderes de los partidos de la oposición para abordar la fusión de las caja puede quedarse a medias, porque mientras el Bloque sí tiene previsto acudir a la cita, el PSOE mantiene sus reservas y duda en responder a la oferta.

Alberto Núñez Feijóo convocó por carta al secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, y al portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, para reunirse de inmediato con el fin de tratar de alcanzar una postura unitaria de Galicia ante la cita que el miércoles tienen las dos cajas gallegas con el Banco de España, en la que también habrá representación de la Xunta.

Fuentes del Bloque dieron por hecho que Guillerme Vázquez acudirá "sin ninguna duda" a la llamada de Núñez Feijóo por entender conveniente "fijar una postura de país".

Sin embargo, Manuel Vázquez duda de las intenciones de la convocatoria de Feijóo y no avanza cuál será su respuesta a Núñez Feijóo, si bien fuentes del PSdeG apuntan que podría no ir y que su ausencia estaría justificada tras el "fracaso en el ultimátum de 48 horas" que dio el presidente gallego el pasado miércoles para alcanzar la fusión de las cajas.

De hecho, el líder del PSdeG acusó al jefe del Ejecutivo gallego de "mentir" en la Cámara y denunció su "fallo" pese al apoyo "incondicional" de los socialistas. En todo caso, la incógnita sobre su presencia en el encuentro se despejará hoy tras la reunión de la ejecutiva del PSdeG, en la que se debatirá sobre las cajas y donde Vázquez anunciará su postura definitiva.

Entre tanto, la interpretación de este llamamiento a los líderes de la oposición, que, según pudo saber Europa Press, el presidente trató de justificar con sus interlocutores en base al "importante momento" que afronta Galicia con respecto a su futuro financiero, es variable. Así, para algunas voces pretende escenificar la unidad a favor de la fusión, mientras que otras la ven una estrategia para intentar "socializar" un hipotético fracaso y denota la "escasa confianza" con la que Núñez Feijóo afronta el encuentro el Banco de España.